El presidente de la Asociación de Panaderos Industriales de la Ciudad describió el duro panorama que atraviesa la actividad por la suba constante del precio de la harina y la caída del consumo. “El panorama es horrible, la mayoría son pequeños establecimientos familiares y a la gente se la ve muy mal. Hoy el que entra a comprar te dice 'dame cinco pesos', es el termómetro de lo que está pasando en la calle”, advirtió José Álvarez.
Según Álvarez, el precio de la harina sube continuamente. “Todavía no sabemos dónde va a ir parar el precio. Tienen que empezar a regular el mercado”, pidió el dirigente, que contó que en los últimos 45 días cerraron 16 panaderías, situación que “nunca había pasado”.
A la suba del precio de la materia prima -que alcanzó los 1100 pesos por bolsa de 50 kilos esta semana, según el dirigente- se suma el aumento de los servicios y los alquileres y la caída del consumo. “Se siente la bronca de la gente. Está pasando lo mismo que en 2002. Tiene que haber controles”, reiteró Álvarez que pidió un mayor control del Gobierno a los molinos que marcan el precio de la harina según los valores internacionales y del dólar.
“Le pedimos al Estado, a la Secretaria de Comercio que no existe o a quien sea, no se puede producir si no sabés el costo de la bolsa de harina. Si cobran a precio internacional el trigo no podría estar más de 600 pesos y hoy la estamos pagando 1100”, se quejó el panadero.
El precio del kilo de pan subió esta semana un 21 por ciento. El kilo de pan pasó de un valor de banda de precios de entre 65 y 70 pesos promedio a un precio de entre 80 y 90 pesos.