“¿Hasta cuándo nos chuparán la sangre?”

 

“¿Hasta cuándo nos van a seguir chupando la sangre?”. La pregunta y la indignación del jefe del bloque del Frente Progresista Felipe Michlig cerró otra catarsis política en el Senado, que el jueves rechazó el ajuste del gobierno de Mauricio Macri, el despojo de recursos a la provincia y le anunció al gobernador Miguel Lifschitz que acompañará todas las “respuestas políticas y jurídicas” que adopte en defensa de los “intereses y derechos de los santafesinos”. Una de ellas podría ser el faltazo a la convocatoria del martes en la Casa Rosada. La declaración fue aprobada por 18 a 1 porque el senador radical Hugo Rasetto volvió a ser el solitario defensor de Macri. Uno de los autores del proyecto, el socialista Miguel Cappiello, advirtió que “Santa Fe va a ser una de las más castigadas” por la quita del fondo sojero y los subsidios al transporte urbano y la tarifa social energética que estimó en 5.000 millones de pesos anuales. Pero Michlig lo corrigió, dijo que la pérdida de recursos en esos tres rubros será superior a los 7.000 millones.

El senador Michlig denunció la “discriminación” de Macri a Santa Fe en tono de pesadilla. “¿Hasta cuándo va a seguir esto?, se preguntó. Y le tiró a los diputados nacionales de Cambiemos, Luciano Laspina y Lucas Incicco, que en lugar de “defender a los santafesinos” se alinean con Macri y su ministro Nicolás Dujovne. “Es lamentable que  estén a favor” del despojo a la provincia, “pero claro, viven en Buenos Aires, no conocen a Santa Fe. No pisan el barro en el interior”.

El proyecto de Cappiello fue apoyado por su colega del socialismo Miguel González y tres radicales, entre ellos Michlig. En el recinto, se sumaron los once senadores del PJ. “Nosotros vamos a acompañar”, dijo el jefe del bloque Armando Traferri. Michlig  le preguntó a su correligionarios del sur que tienen bancada aparte y dos de ellos le dijeron que sí, Germán Giaccomino y Lisandro Enrico. “Ahora se suma parte del Frente Progresista que faltaba”, dijo entre risas. Era el 18 a 1 de la semana pasada: la mayoría del Senado contra el único defensor de Macri: Rasetto.

La declaración del Senado rechaza los “inconsultos ajustes” que anunciaron Macri y Dujovne, entre ellos la quita de “subsidios al transporte y la eliminación de la tarifa social energética” y le anuncia a Lifschitz que acompañará todas sus respuestas “políticas y jurídicas en defensa de los intereses y derechos de los santafesinos”. Un senador del PJ propuso que les envíen la minuta a los 22 legisladores nacionales de Santa Fe en el Congreso “para que sepan que éste es un pronunciamiento institucional de la provincia”.

-Les vamos a remitir copias a cada uno de los diputados y senadores nacionales –prometió el vicegobernador Carlos Fascendini.

Cappiello dijo que el ajuste de Macri llenó de “incertidumbre y angustia” al país. “Además de un endeudamiento extremo, récord (más de 332 mil millones de dólares), una inflación sin control (que podría superar el 40% a fin de año), la disparada del dólar (que oscila en 40 pesos), tasas de interés (del 60%) que desalientan cualquier inversión productiva, una ola de despidos, la caída del salario real y las jubilaciones, se agrega ahora la inconsulta quita de subsidios al transporte y la tarifa social energética”, dijo el senador del oficialismo provincial.

“Santa Fe va a ser una de las provincias  más castigadas”, señaló Cappiello que estimó el costo del ajuste en más de 5.000 millones de pesos. Sin embargo, Michlig hizo otra cuenta. “La quita del fondo sojero nos va a costar a los santafesinos alrededor de 2.500 milones de pesos anuales. Los subsidios al transporte otros 2.500 millones. Ya estamos en 5.000 millones. Pero hay que sumar otros 2.000 millones de la tarifa social que beneficia a más de 200 mil santafesinos que pueden pagar la luz porque la tienen subsidiada. ¿Qué harán ahora? Entonces, con estas tres medidas estamos hablando de una pérdida de más de 7.000 millones”. 

El gobierno de Macri –insistió Cappiello- incumple el fallo de la Corte Suprema por una deuda por coparticipación (que Santa Fe estima en 54 mil millones de pesos) y el Consenso Fiscal. “Si esto no es una discriminación se le parece bastante”. El gobernador Lifschitz estudia acciones políticas, pero también acciones jurídicas. Y esto es lo que vamos a acompañar desde el Senado y la Legislatura”, cerró.