A pocas semanas del 33° Encuentro Nacional de Mujeres en Chubut (ENM) y a menos de tres meses de los femicidios de Evelyn Tatiana Lehr y Cintia Guevara Orellano en la región, otra joven, Rosa Noemí Acuña, fue sometida a una violación grupal, estrangulada y prendida fuego en un basural clandestino de Trelew cuando aún estaba con vida. Su crimen es un cimbronazo profundo en momentos que las colectivas políticas y sociales de mujeres, lesbianas, trans y travestis se encuentran organizando esta convocatoria histórica en la que, se prevé, participarán unas 70 mil personas.  Diferentes agrupaciones feministas adelantaron que en los talleres del Encuentro van a reclamar el presupuesto pendiente para la Ley de emergencia de violencia de género que se promulgó el año pasado y la capacitación judicial con perspectiva de género. 

“Con enorme tristeza, dolor e indignación supimos que el 4 de septiembre Rosa Noemí Acuña, una joven de 25 años, apareció sin vida y calcinada en un basural del Parque Industrial de Trelew”, expresa el pronunciamiento de la Comisión Organizadora del ENM. “(…) Se trata de un crimen complejo, atravesado por diferentes formas de violencia y que involucra a hombres y mujeres, no encuadrándose en la figura del femicidio. El hecho fue calificado provisoriamente por los fiscales como ´homicidio con ensañamiento´ debido a que prolongaron su sufrimiento hasta matarla.”

El documento repudia el tratamiento que los medios locales le dieron al crimen, configurando estereotipos y preconceptos “que reproducen desigualdades y violencias de género, así como el vacío de información clara acerca del hecho”. El cuerpo incinerado de Rosa fue exhibido por el Diario Jornada en su portada y viralizado por Radio 3 con el hashtag #MujerCalcinada. “La difusión de estas imágenes y mensajes contribuyen a legitimar la idea de que las mujeres somos objetos susceptibles de humillación, violencia, y hasta de ser asesinadas de las formas más atroces.”

Marita Quiroga, de la Cátedra Abierta de Género de la Universidad Nacional de la Patagonia-Sede Trelew  y una de las organizadoras del Encuentro, alertó que esa muerte ocurre en medio de una coyuntura central para el feminismo. “Es el tercer femicidio en situaciones aberrantes, con la complejidad añadida que tiene que ver con múltiples violencias patriarcales fuertemente arraigadas en nuestra sociedad, y al mismo tiempo involucra a otrxs y aparece en ese sentido la imposibilidad de comprender la muerte bajo las mismas lógicas que el patriarcado instala.” 

Quiroga remarcó “la dificultad de quienes estamos en espacios de mujeres para manifestar el horror, si bien esta Comisión Organizadora se ha pronunciado sobre el femicidio de Rosa. Entendimos que debemos manifestarnos frente a la comunidad. Denunciar la forma en que los medios publican las imágenes de Rosa, la ausencia de información acerca de los varones que participaron del crimen y el hermetismo alrededor del caso. No es posible quedar al margen, el límite siempre es la muerte”.

¿Podría estar vinculado a la trata de personas en la región?

-En ese sentido nuestra provincia es conocida en el país y en organismos internacionales. La trata con fines de explotación sexual está extendida en toda la región. Captan niñas en el interior y en barrios marginales. Mientras tanto los espacios estatales se muestran incapaces de brindar respuestas para esas niñas que rápidamente dejan la escuela, que quedan involucradas en fiestas extrañas, como la “juntada” de Rosa.  

Desde su desaparición hasta el hallazgo de los restos en el basural, las investigadoras de la Cátedra de Género observaron ligazones en torno de quién era Rosa, dónde vivía, qué redes fueron tejiendo sus vínculos. “Advertimos que no era una situación excepcional. Son entramados que tienen mucha historia, involucran a diferentes niveles del poder. Para desarmarlos debe haber un compromiso cierto y contundente de acción por parte del Estado, pero no sé si será posible.” 

Quiroga explicó que las redes de trata y prostitución que operan son de larga data y permanecen activas. “La maraña es compleja que en general estas redes alcanzan a la propia Justicia y a la policía. Pero siempre terminan redundando en atisbos de cambios para mujeres y niñas que culminan con la destrucción de sus pensamientos, de su vida cotidiana y como sucedió en este caso, con la muerte física.” 

La foto del cuerpo calcinado rebotó en infinidad de medios. Hace tiempo el activismo feminista realiza acciones para desnudar una construcción mediática perversa de las derivas de mujeres y  sectores vulnerables. “Los medios aportan a la construcción de realidades. El cuerpo incinerado de Rosa fue tapa de diario y la primera apreciación sobre una de las detenidas señaló cómo podía ser partícipe otra mujer. Deberíamos preguntarnos de qué maneras se nos enseña a vincularnos en los procesos de socialización, cómo nos vamos haciendo varones y mujeres. Al interior de algunas prácticas como estos negocios clandestinos, los códigos que se desarrollan no tienen que ver con quienes están ejerciendo determinados roles”, advirtió. “Sabemos que hay ajustes de cuentas que tienen sus particularidades en los cuerpos femeninos y las formas de vinculación no tienen que ver con la forma de relacionarse por ser mujeres. Como si esta sociedad nos hiciera ser compañeras… Es todo lo contrario. Y debemos poder comprender que las lógicas con que se mueven ciertos negocios millonarios no se construyen sobre vínculos de afectividad, sino que las personas captadas son objetos y mercancías.” 

El rechazo del Senado a la legalización del aborto es otra de las cuestiones que este año atraviesan el corazón del Encuentro.

-Nuestra sociedad no es conservadora, sin embargo a partir del debate por el aborto legal, seguro y gratuito surgió una confrontación desde sectores de la comunidad y contra la Comisión Organizadora del Encuentro. Grupos provida hicieron un pedido al intendente Adrián Maderna y al gobernador Mariano Arcioni para que impidieran este Encuentro al que definen como “abortista” y de “asesinas”. Quieren instalar desde los medios hegemónicos la pequeña foto del enfrentamiento en la catedral y el van a romper todo. Pero las intentonas no tuvieron efecto y seguimos teniendo buena recepción de las autoridades locales y provinciales. 

En Trelew se están desarmando sentidos oscurantisas para cargar este Encuentro de otras enormes posibilidades, sostuvo Quiroga. Ponen el énfasis en la historia del movimiento feminista y en la posibilidad de discutir y pensar, de brindarse estrategias para transformar entre todxs.  “Las mujeres no arman semejantes travesías para destruir las ciudades por donde pasan. La expectativa es que octubre sea un momento importante de construcción y por las reivindicaciones que se generan en estos espacios que muchas veces son el preámbulo de políticas públicas. Tenemos que poner el cuerpo.”