La cirugía a la que fue sometido de urgencia Jair Bolsonaro puso en crisis al partido militar formado en su entorno. El capitán retirado del Ejército estuvo hasta los primeros minutos de ayer en un quirófano del Hospital Albert Einstein de San Pablo debido a complicaciones intestinales derivadas de la puñalada recibida hace una semana durante un acto de campaña. Fue la segunda intervención quirúrgica en seis días. El parte médico divulgado en la mañana de ayer indicó que el paciente evolucionaba favorablemente pero retornó a la sala de terapia intensiva y no informó sobre cuándo se le dará el alta, faltando sólo 24 días para la primera vuelta electoral.
“Sin Bolsonaro no estamos en condiciones de llevar millones de personas a las calles”, reconoció el diputado Mayor Olimpio, policía de San Pablo que integra la “Bancada de la Bala” en en el Parlamento.
Las declaraciones y el gesto del diputado reflejaban el desconcierto del primer círculo de poder bolsonarista en una campaña signada por los imponderables y la proscripción de Luiz Inácio Lula da Silva, con su 40 por ciento de intención de voto.
Con la salida de Lula, reemplazado por Fernando Haddad, Bolsonaro quedó primero en las encuestas con el 26 por ciento de apoyo y más del 40 por ciento de rechazo. Merval Pereira, comentarista en jefe del grupo Globo, sostuvo que el candidato no podrá hacer campaña ni estar en los debates hasta el 7 de octubre, y consideró difícil que pueda participar en las actividades proselitistas entre ese día y el 28 del mismo mes cuando será el ballottage.
Generales, policías y pastores entran y salen nerviosamente del centro médico ubicado en el sur de San Pablo devenido en comando de campaña del Partido Social Liberal (PSL).
Según el diario Valor Económico, hay disputas entre los diversos grupos bolsonaristas profundizadas después del ataque con arma blanca del jueves pasado. Una de las facciones la comanda el general Hamilton Mourao, candidato a vicepresidente en la fórmula del PSL. Según parece, el general estaría interesado en dar un golpe interno, representar a Bolsonaro en los debates televisivos y hasta convertirse en el candidato presidencial del PSL. Mourao es conocido por exaltar el golpe de 1964 y arengar a favor de otras sediciones políticas. En 2015 Dilma Rousseff lo separó del Comando Militar del Sur por fogonear el impeachment. La semana pasada el general respaldó la posibilidad de un golpe militar como antídoto para el clima de anarquía que se agravó en esta campaña presidencial. Un aliado político del general, Levy Fidelix, habló a las claras sobre la posibilidad de un putch dentro para voltear al candidato presidencial. Dijo Fidelix : “Bolsonaro puede quedarse 40 días en el hospital, no vamos a perder ese tiempo (...) Mourao puede ser el candidato”.
Otro grupo está formado por los hijos de Bolsonaro. Encabezado por el diputado federal Eduardo a quien secundan el diputado estadual por Río Flavio y el concejal de esa ciudad Carlos. Según trascendidos los hijos del capitán no estarían dispuestos a ceder el comando de la campaña al general Mourao.