El Instituto de Investigaciones Gino Germani, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), el Centro de Salud Mental Mauricio Goldenberg y la Fundación Soberanía Sanitaria, entre otros, cuestionaron la reducción del Ministerio de Salud al rango de Secretaría y advirtieron que la salud pública “está en peligro”. Estas ONG advirtieron que “la degradación del Ministerio de Salud, la primera que sucede en un gobierno democrático, además de ser elocuente desde lo simbólico, traerá aparejada una pérdida del poder de rectoría de la política sanitaria nacional, hasta entonces ejercido, a pesar de innumerables dificultades, por dicho ministerio. Este cambio, viene a sustanciar la reforma del sistema sanitario argentino que desde 2016 se pretende llevar adelante”.
A través de un comunicado, que también firmaron el director del Comité de Etica y Programa de Bioética del Hospital de Clínicas, Juan Carlos Tealdi, y el titular de la Maestría de Salud Pública de la Universidad Nacional de Rosario, Mario Rovere, las organizaciones denunciantes señalaron que “en agosto de 2016 el gobierno nacional dio a conocer la creación de la Cobertura Universal de Salud (CUS) con el objetivo de brindar cobertura a los 16 millones de personas que se atienden en el sector público”. Los firmantes, entre quienes está el ex ministro de Salud Daniel Gollan, agregaron que “para ponerla en funcionamiento (hasta el momento solo se aplica como piloto en la provincia de Mendoza), la CUS requiere la creación de una agencia específica que determine qué prestaciones cubrirá y cuáles no. Se trata de la Agencia Nacional de Evaluación de Tecnologías de Salud (Agnet), actualmente en discusión en el Senado”. A su criterio, “la discusión sobre la creación de una Agencia de estas características no puede ser aislada del modelo sanitario que tiene por detrás” y exhortaron a los legisladores a “propiciar un debate profundo y plural (…) para la elaboración de un proyecto de Agencia que responda a un modelo sanitario de equidad e inclusión social”.
En ese sentido elaboraron una síntesis que desmenuza los cuestionamientos a la creación de la Agnet:
- Injustificadamente, el presidente del Directorio de la Agnet sería designado por el Ejecutivo, sin concurso público, procesos de impugnación ni participación alguna del Congreso Nacional.
- Si se va a crear una Agencia, se deben prever mecanismos idóneos, participativos, transparentes y plurales para la integración de su Directorio, con estrictas reglas que prevengan conflictos de interés.
- El proyecto no contempla criterios epidemiológicos que tengan en cuenta los determinantes del proceso salud-enfermedad. Una agencia de estas características debe estar vinculada con los problemas de salud emergentes de cambiantes escenarios demográficos y ambientales, con la creciente complejidad de las innovaciones en salud disponibles para las mayorías sin restricción y con garantía de universalidad de acceso.