En tiempos donde algunas voces cuestionan la existencia de las universidades del conurbano bonaerense, una vez más la realidad se impone para demostrar la importancia de la educación pública en todo el territorio nacional. Esta vez, la protagonista fue la Universidad Nacional de Hurlingham (UNAHUR) que, en el marco de la Semana Nacional de la Ciencia, abrió las puertas de la recientemente inaugurada Biofábrica, un laboratorio de micropropagación in vitro de especies vegetales destinado a tareas de docencia, investigación y extensión universitaria.
Periodistas científicos, comunicadores y docentes de Ciencias Naturales de escuelas secundarias de la región pudieron conocer de cerca la Biofábrica, espacio donde se formarán los futuros biotecnólogos y licenciados en tecnología de los alimentos y la gestión ambiental. A su vez, allí se producirán plantas con control de calidad y sanidad para ser utilizadas en la producción de los distintos actores agrarios de la región. Un hecho que, sin dudas, generará un desarrollo para el cuidado ambiental.
El rector de la UNAHUR, Jaime Perczyk, definió a la Biofábrica como un laboratorio con “el mejor equipamiento y la mejor tecnología de punta a nivel local, regional y nacional. Con investigación y dedicaciones para que nuestros profesores, estudiantes y trabajadores tengan lo mejor que pueden tener. Queremos ponerlo al servicio del desarrollo de Hurlingham, de la región, de la Provincia de Buenos Aires y de la Argentina” agregó.
Así, en el flamante laboratorio se podrán producir, en forma segura y limpia, miles de copias de una planta para utilizarlas con fines productivos o ambientales. Perczyk explicó que se podrán “fotocopiar plantas, árboles, vegetales”. De esta forma “si uno quiere desarrollar un árbol para arbolado urbano, elige el mejor, el que echa mejores raíces, el que no rompe los caños, el que tiene las mejores flores y crece más rápido”
Además, Perczyk detalló los distintos proyectos que se pondrán en marcha: “Queremos que nuestros estudiantes aprendan a trabajar en la Biofábrica y se lleven de nuestra Universidad el conocimiento que significa hacer ciencia. También queremos hacer extensión: que los estudiantes de los últimos años de escuelas secundarias puedan ver que en esto hay un proyecto y un destino para ellos y queremos hacer investigación: queremos producir y transferir conocimiento a la industria, a los pequeños agricultores que están en nuestra región. Queremos hacer ciencia porque si no la hacemos nosotros, estaremos reproduciendo ciencia que hacen otros. Entonces, queremos hacerla nosotros, ser libres, emanciparnos, que nuestros estudiantes lo hagan. Creemos que tienen derecho y nosotros trabajamos para poder proteger ese derecho”.