Murga argentina al estilo uruguayo: esa es la cuestión. O así al menos lo intentarán hoy y mañana las diez agrupaciones vernáculas invitadas a participar del cuarto encuentro de murgas “a la celeste” en el ECuNHi (Libertador 8151). “Somos murgas que elaboran sus espectáculos en base a las reglas del concurso del carnaval uruguayo y las tradiciones que lo caracterizan, pero sin tener la necesidad de respetar estrictamente ninguna”, es la explicación formal que surge de La Que Se Viene, combo de Boedo que abrirá la serie de shows esta tarde a las 18. “Nuestra posición es que, si bien ambos tipos de murgas comparten la incorporación y el ensamble de diversas disciplinas, tienen más diferencia que similitudes: mientras las murgas uruguayas ponen hincapié en lo coral y lo teatral, las nuestras centran su estética en el baile y el factor callejero”, dicen. Floja de Papeles, agrupación que sucederá a La Que Se Viene en la grilla, esboza una definición similar. “La llamada murga porteña es fundamentalmente de desfile con mayor presencia de la percusión y del baile. La uruguaya, en cambio, es una murga de escenario, mucho más teatral, un espectáculo que suele tener un principio, un nudo y un desenlace. Pero ambas se parecen en que lo humano aparece como algo central”, explican.
La tercera en subir a escena, Le Puse Cuca, debe su nombre a un chiste de Los Simpson, y tiene el fin de reclamar y denunciar los males del sistema. Modestia Aparte, la siguiente en el orden de aparición, se originó en Rosario hacia 2012 y está integrada totalmente por mujeres. “Hacer murga a la uruguaya, como decimos en Rosario, es poner en escena una cantidad de expresiones artísticas, políticas y sociales que recuperan saberes populares aferrados en el barrio, el fútbol, o las mujeres y los hombres”, cuentan ellas, cuyas letras están comprometidas con banderas feministas. La violencia de género y el aborto, entre ellas. “Estamos muy contentas y movilizadas por tocar en un lugar tan significativo como el ECuNHi, un espacio tan cargado de historias que nos sugiere, nos interpela y nos emociona”.
También de Rosario proviene Los Vecinos Re Contentos, quienes, tras la actuación de La Descorchea, cerrarán la jornada de hoy. Ellos no quieren revelar el significado del nombre porque “comprometería” la integridad física de sus miembros, pero sí las razones que los motivaron a formarla. “Elegimos este género porque combina música, actuación y pintura”, explica Javier Galarza, uno de los fundadores. “Además, es importante agregar que no hubo una industria que nos haya impuesto el género, sino que surgió del conocimiento espontáneo de gente curiosa que comenzó a escuchar lo que se hacía del otro lado del río y se fue animando a hacer sus propios espectáculos. Poder hacer uno de estos en el ECuNHi es muy movilizante, sobre todo en momentos como este”.
La actuación de las murgas estará precedida por una serie de charlas y talleres que comenzarán a las 15 horas, y tendrán como partícipes a los uruguayos Pablo Riquero y Emilio Castro, trabajando sobre “Canto de murga” y “Puesta en escena”, respectivamente. Y una charla colectiva que, además de diversos integrantes de murgas argentinas, tendrá como protagonista a la uruguaya Soledad Castro Lazaroff, de la renombrada murga uruguaya Falta y Resto.
El domingo, en tanto, habrá talleres sobre batería de murga a cargo de los bateros de la murga uruguaya La Mojigata (que cerrará el encuentro en vivo). También se trabajará sobre tímbrica y empaste, y habrá dos charlas temáticas, sobre “Identidad y desafíos de la murga en la Argentina”, y sobre gestión y producción asociada al género. Tras ambos encuentros, el escenario se poblará de más números en vivo a través de La Cigarra (una murga de niños y adolescentes nacida en Quilmes), Engancha Pichanga, Baila La Chola y La Quetejedi, afincada en Berazategui. “Hasta el momento tenemos dos espectáculos armados, Exito o fracaso y Códigos. En ambos tratamos de poner de manifiesto temas contemporáneas y cotidianos, como los paradigmas sobre el progresar y el triunfar como sujetos. Siempre apelando a una secuencia constante de humor, crítica social y reflexión en las letras, en equilibrio con la música y la puesta en escena”, se presentan los berazateguianos, nacidos como murga en 2015 y desarrollados en forma autogestiva e independiente. “El nombre de la murga hace referencia a la expresión popular lunfardesca que nombra a alguien en tono de burla. Ser un ‘quetejedi’ para nosotros también es ser el que incomoda, el inoportuno, el que mete la pata vibrante y apasionadamente”.
Otra de las murgas que actuarán el domingo, Engaña Pichanga, nació en un taller coordinado por uno de los capomurga de Buenos Aires (Bruno Ferreccio), y desde ese momento pasó por diversas formaciones y experiencias. “Siempre estuvimos vinculados con las causas populares y los derechos humanos, por eso nos llena de emoción estar en el ECuNHi. Es una forma de resistencia necesaria y preciosa llenar de música ese espacio tan signado por el terror”. La otra murga femenina del convide (Baila La Chola) se manifiesta en sintonía. “Es una suerte que podamos expresar estos temas en un espacio como el ECuNHi, ganado para los derechos humanos, en el que fue posible convertir un lugar de terror en un lugar de carnaval y alegría”, cierra Ana Laura Pereira, integrante de este combo cuyo nombre, dicen ellas, alude el movimiento corporal y lúdico de las mujeres al bailar.