Con Lionel Messi ingresando en el segundo tiempo, Barcelona apenas pudo rescatar un punto frente a Athletic Bilbao, dirigido por Eduardo Berizzo, como local e igualó 1-1, lo que significó su tercer partido consecutivo sin triunfos (dos empates y una derrota) en el campeonato español.
El rosarino entró a la cancha a los 54 con su equipo debajo en el marcador y fue el autor de la asistencia para el gol del empate que marcó Munir El Haddadi, a sólo seis minutos del final. A la habitual fragilidad defensiva mostrada últimamente por el elenco catalán, ayer se le sumó el flojo desempeño del mediocampo, que formó con Sergi Roberto, Rakitic y Vidal. Tanto Messi como Busquets –también ingresó en el complemento– habían sido reservados por su DT en vista del choque con Tottenham del miércoles por Champions, pero ante el buen partido de los de Berizzo, el plan cambió.
Mientras tanto, quien no pudo aprovechar el traspié del Barça fue Real Madrid, que no pasó del empate sin goles como local ante Atlético en el derby capitalino y comparte la punta con los catalanes. El equipo de Simeone, que sigue a dos de la cima, dejó una mejor imagen que el dueño de casa, donde fue figura el belga Courtois en el arco.
