La relación entre Gerardo Morales y Tulia Snopek, hija del ex gobernador peronista Guillermo Snopek, se hizo publica en marzo de este año, durante la celebración de la Fiesta de la Vendimia en Mendoza. En ese momento ambos estaban casados y convulsionó el mundo político de Jujuy que la hermana del senador peronista, homónimo de su padre, saliera con uno de los máximos referentes del radicalismo a nivel nacional. Si bien tienen intención de casarse el próximo 15 de diciembre, el evento depende de una sentencia de divorcio pendiente entre la novia y el abogado tucumano Carlos Marti Coll, con quien contrajo matrimonio en noviembre de 2015. El romance generó un escándalo que tuvo alcance nacional cuando el senador Snopek, abogado de su todavía cuñado, en plena sesión sobre la legalización del aborto planteó una cuestión de privilegio y denunció que Morales lo amenazó y utilizaba la justicia en beneficio propio.
Los rumores del romance entre Tulia y Gerardo comenzaron a mediados de febrero, cuando se viralizó una foto de la pareja tomando un café. El lugar no era para nada romántico y eso generó ciertas dudas al principio. Fue en un bar de una estación de servicio. Pero luego de la presentación en sociedad, la escribana y titular de un Registro Automotor, comenzó a aparecer en prácticamente todos los actos oficiales, siempre sonriente y radiante junto al Gobernador. En una charla que mantuvo con periodistas a la hora de anunciar su casamiento el mandatario reveló que se conocen con Tulia desde la adolescencia, pero se pusieron de novios hace poco tiempo.
El paso de Tulia por la gestión de gobierno, en carácter oficial, fue fugaz. El 23 de enero se la designó a través del decreto 6065 como Síndico Suplente de Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado (J.E.M.S.E.) en carácter ad-honorem. El 19 de abril el gobernador aceptó su renuncia al cargo.
En torno al divorcio entre Tulia y Marti Coll se iniciaron tres procesos judiciales, explicó a PáginaI12 el senador Snopek. Cada integrante de la pareja inició el trámite en Tucumán, aunque Tulia desistió del suyo para iniciar un expediente en Jujuy. La Sala II del Tribunal de Familia en poco más de un mes disolvió el vinculo en un proceso en el que excluyeron a Marti Coll por presentar un escrito con tinta azul. La reglamentación del Poder Judicial de la provincia establece que todas las presentaciones se deben firmar con tinta negra. El reclamo llegó hasta el Superior Tribunal de Justicia (STJ) que, una vez más, falló a favor de la futura primera dama. La sentencia fue firmada por Elizabeth Altamirano, que entró al máximo órgano del Poder Judicial en diciembre de 2015, a las pocas horas de levantar su mano junto a Pablo Baca, entonces diputados radicales, para ampliar la Corte de cinco a nueve integrantes. El senador Snopek reclamó que debería haberse apartado del proceso, al igual que la Presidenta del STJ, Clara Langhe de Falcone, que compartieron banca en la legislatura provincial con el abogado. La sentencia aún no está firme. En ese contexto, Morales dijo que si para el 15 de diciembre no tenía el divorcio, se casaría bajo el ritual andino. Sería paradójico, ya que Milagro Sala, su enemiga pública número uno, se casó con Raúl Noro bajo esa ceremonia ancestral.