Con un golazo del colombiano Andrés Roa desde afuera del área, Huracán se impuso ayer ante Belgrano por 1-0 en el Gigante de Alberdi y trepó al segundo puesto de la Superliga donde también se ubica Atlético Tucumán –aunque con un partido menos–, a cinco puntos del líder Racing. Fue el tercer triunfo consecutivo para los dirigidos por Gustavo Alfaro que, además, acumulan cuatro sin perder. Mientras tanto, los cordobeses –que ganaron sólo un partido en el torneo– siguen sin poder alejarse de los puestos de descenso, zona de la que sólo dos puntos los separan.
Huracán logró adueñarse del encuentro gracias a su mayor jerarquía individual, donde se destacó el buen pie de Iván Rossi y algunos destellos de talento de Roa, quien en tan sólo su cuarto partido para los de Parque Patricios ya parece sentirse como en casa. El gol del triunfo de su equipo fue prueba de ello, todo “hecho en” Colombia. El número diez le robó la pelota a Gil Romero en el medio, avanzó varios metros con ella al pie y sacó un derechazo desde afuera del área que se metió en el ángulo superior izquierdo para hacer estéril la volada del bueno de Rigamonti.
Claro que, para que la visita sea superior, fue de mucha ayuda la inexpresiva imagen que mostró Belgrano. Recién en los últimos minutos, el dueño de casa logró llevar peligro al arco de Marcos Díaz. Este adelantamiento en el campo se debió a varios factores: el resultado adverso, la amenaza latente del descenso, el buen ingreso del movedizo Lugo y, principalmente, el exagerado retroceso de Huracán, que se enamoró bastante antes del final de la ventaja. Pero Belgrano nunca encontró las armas para disputarle ese romance a este gran Huracán de Alfaro.