Tras más de seis meses sin competir por una lesión de rodilla, el suizo Roger Federer (17) reapareció ayer en el circuito con un tenis más práctico que brillante para vencer al austríaco Jürgen Melzer (300) en la primera ronda del Abierto de Australia. El ex número uno del mundo, sin chispa en las piernas y cometiendo errores impropios de su categoría, derrotó al nacido en Viena por 7-5, 3-6, 6-2 y 6-2, en dos horas y dos minutos para festejar su primera victoria de 2017. “Aun si hubiera perdido habría estado bien, porque lo que importa es estar de vuelta en una cancha”, dijo tras la victoria el ganador de 17 Grand Slams, y agregó: “Creo que mi saque estuvo y se fue al principio del encuentro, lo que me sorprendió un poco porque en la Copa Hopman había funcionado bastante bien. Creo que sentí un poco de nervios al principio del duelo”. “Jugar contra Jürgen fue algo muy lindo. Nos conocemos desde que teníamos 16 años. Incluso jugamos juntos dobles en el Orange Bowl en Miami. Tenemos que volver”, aseguró. El cuádruple campeón del certamen australiano (2004, 2006, 2007 y 2010) chocará mañana en segunda ronda con el estadounidense Noah Rubin (200).
Antes, en la misma cancha, Andy Murray (1) se había impuesto al ucraniano Illya Marchenko (95) en su primer partido en un Major desde que alcanzó la cima del ranking. “Llegué al número dos hace siete años. Ha sido muy difícil llegar al primer puesto”, recordó el medallista de oro de los Juegos Olímpicos de Río 2016 tras su 7-5, 7-6 (5) y 6-2 sobre su rival, que por momentos sorprendió con su desparpajo. Campeón de tres Grand Slams, el británico de 29 años arrancó así su intento por conquistar el esquivo Abierto de Australia, torneo en el que perdió las cinco finales que disputó, ante Federer en 2010 y ante el serbio Novak Djokovic en las de 2011, 2013, 2015 y 2016. Su siguiente rival en Melbourne Park será el ruso Andrey Rublev (152).
Por otro lado, en la madrugada de hoy debutaban Djokovic (2), ante el español Fernando Verdasco (40), y Rafael Nadal (9), que lo hacía frente el alemán Florian Mayer (49).
