El domingo 30 de septiembre, este diario publicó un artículo con la firma de su corresponsal en Francia, Eduardo Febbro quien, a propósito de las elecciones europeas en aquel país, analiza diferentes posturas entre las cuales está la del Partido Francia Insumisa y su referente Jean Luc Mélenchon. Pues bien, en mi carácter de representante de dicho Partido en Argentina, rechazo la amalgama realizada en ese artículo, entre las posiciones de Jean Luc Mélenchon y nuestro movimiento, “La Francia Insumisa”, y el movimiento de Marine Le Pen, Reagrupamiento Nacional (ex Frente Nacional).
El señor Febbro parece olvidar el constante compromiso, desde la década de los años 70, de Jean Luc Mélenchon con las causas de los pueblos, de América Latina y, en el caso de los argentinos, el apoyo incondicional a nuestra lucha contra la dictadura cívico-militar. De hecho, su activa solidaridad lo llevó a recibir a cientos de refugiados políticos e inmigrantes en su comuna de Massy en tanto que alcalde adjunto. Desde aquellos tiempos nunca dejó de defender el derecho de los inmigrantes de toda naturaleza a una vida digna; su combate contra el racismo y la xenofobia es y ha sido ejemplar. Durante años luchó contra el Frente Nacional de Jean Marie Le Pen y su heredera Marine Le Pen y sus tesis criminales. Jean Luc Mélenchon es el político que tuvo el coraje de combatirlos cuando otros políticos no se atrevían a enfrentarlos abiertamente, a tal punto que Marine Le Pen nunca quiso medirse con él durante el debate de la última campaña presidencial.
Por todo esto nos resulta insoportable esta amalgama odiosa entre Jean Luc Mélenchon y Marine Le Pen. El periodista parece olvidar que nuestro movimiento La Francia Insumisa representa a la principal fuerza de oposición a las políticas neoliberales llevadas adelante por el presidente Macron, políticas que están generando pobreza, desocupación, destrucción de las fuerzas productivas, desastres ecológicos, evasión fiscal y fuga de capitales. Toda similitud con las políticas de Mauricio Macri no son casualidad. El castigo a los sectores populares fomenta la xenofobia y el repliegue sobre sí mismos y sirven a la propagación de las ideas racistas en una parte de la población que busca un chivo expiatorio en los inmigrantes.
La Francia Insumisa, conducida por Jean Luc Mélenchon, es la única fuerza política de izquierda con capacidad para combatir al neoliberalismo y su capitalismo salvaje. El actual período electoral (en ocho meses se realizarán las elecciones europeas) abrió una campaña extremadamente difícil, donde las políticas ultraliberales llevadas adelante por la Unión Europea y particularmente por Merkel y Macron, generan desesperanza y rabia, sentimientos utilizados vilmente por todos los partidos protofascistas.
Por ello es que nos preguntamos, estupefactos, cuál es el sentido de amalgamar posiciones tan encontradas como las de Jean Luc Mélenchon y Marine Le Pen. No tenemos respuesta a esto, pero sí sabemos que no es ese supuesto centro “intenso” que dice representar Macron el que servirá para combatir a la extrema derecha, como el señor Febbro parece creer, ya que son esas políticas las que provocan el crecimiento de los movimientos xenófobos y racistas. De allí que el grupo parlamentario de la Francia Insumisa, presidido por Jean Luc Mélenchon, propusiera las siguientes alternativas al proyecto de ley sobre inmigración y asilo: a)Definir una política migratoria concertada a escala internacional y europea; b) Recibir dignamente a las personas migrantes; c) Garantizar el derecho de asilo y crear nuevos estatutos; d) Despenalizar las instalación irregular y luchar contra las trampas de la clandestinidad y la precarización de los migrantes.
Esta es la realidad concreta a propósito de nuestras posiciones sobre la cuestión de la inmigración.
* Representante de Jean-Luc Mélenchon en Argentina.