En 2015, en el medio de una gira-viaje por Sudamérica, la banda brasileña Francisco, el Hombre sufrió un hecho que determinó el curso del proyecto. El plan era pasar la noche en Mendoza y partir al día siguiente a Santiago de Chile, pero en la provincia cuyana les robaron el auto, el dinero, los instrumentos y todas las pertenencias. Y los dejaron con lo puesto y a la deriva. “Fue muy fuerte, nos robaron todo, hasta los pasaportes y no teníamos para comer. Pero nuestro caso se viralizó en las redes, recibimos mucha solidaridad y a los cuatro días compartimos un concierto masivo con Los Nocheros”, cuenta el mexicano Mateo Piracés-Ugarte, quien vive desde hace quince años en Brasil. Hasta ese momento, la banda era un proyecto secundario para todos sus integrantes, pero el episodio desafortunado movió algunas cosas. “Cuando nos sacaron todo, creíamos que la banda se iba a acabar. Pero nos dimos cuenta de que era el proyecto que queríamos hacer y a partir de ahí empezamos a entenderlo como una carrera, como algo colectivo”, detalla Piracés-Ugarte. El quinteto, que en apenas cinco años logró consolidarse y hacerse conocido en la región, se presentará hoy a las 20 en Club Cultural Matienzo, Pringles 1249.
La banda fue creada por los hermanos mexicanos Sebastián (voz y guitarra) y Mateo Piracés-Ugarte (voz y guitarra) en Campinas, en el estado de São Paulo. Y luego se sumaron les brasileños Andrei Martinez Kozyreff (voz y percusión), Juliana Strassacapa (voz y guitarra) y Rafael Gomes (bajo). La diversidad cultural en el interior del grupo dio como resultado un cóctel explosivo y tropical que mixtura punk, rock psicodélico y ritmos latinos como salsa, samba brasilera y bossa, con canciones cantadas en español, portugués e inglés. “Como no era el proyecto principal de ninguno, siempre fue cambiando mucho la banda, porque no había ningún tipo de pretensión. Primero empezamos tocando folk, después rock, luego música electrónica... todo fue cambiando muy rápido de acuerdo al país por el que estábamos viajando”, dice este músico de 25 años. “En Argentina absorbimos mucha cumbia, en Chile agarramos la trova y en Cuba la música fiestera. Ahora estamos regresando a nuestras raíces punk. Pero nuestro estilo musical está en constante mutación y eso nos divierte mucho”.
Si bien el disco Soltasbruxa (2016), el único editado hasta la fecha, consiguió una buena repercusión, hay una canción que tomó vuelo propio. Se llama “Triste, Louca ou Má” y el video registra más de 10 millones de reproducciones. La canción, compuesta por Juliana Strassacapa, pone en discusión mandatos sociales como la ligazón de la mujer con “la casa y la familia”, y hasta se cantó en marchas de mujeres en Argentina.