Concluyó ayer la investigación del FBI sobre el nominado a la Corte Suprema de Estados Unidos, Brett Kavanaugh. Según los republicanos los nuevos resultados no corroboran las denuncias contra Kavanaugh. Sin embargo, el líder de los demócratas en el Senado, Chuck Schumer, sugirió que el FBI encontró indicios de mala conducta en el nominado.
Una vez finalizada la lectura del documento en el Comité Judicial del Senado, el senador Chuck Grassley afirmó que votarán el sábado la nominación del nuevo juez. “Esta investigación no encontró indicios de mala conducta. (...) No hay nada en esto que no sepamos ya”, dijo Grassley en un comunicado. “Estas acusaciones no corroboradas han sido rechazadas de manera inequívoca y reiterada por el juez Kavanaugh, y ni la comisión judicial ni el FBI pudieron localizar a terceros que pudieran dar fe de cualquiera de ellas”, dijo Grassley, anunciando que mañana se hará la votación. “Al igual que el presidente, Grassley dijo hace unos minutos que tenemos la sensación de que no hemos aprendido nada nuevo”, agregó la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders. Preguntada sobre si la Casa Blanca alberga esperanzas de que su nominado sea finalmente confirmado en la votación que llevará a cabo la Cámara Alta, la portavoz se limitó a decir: “Ciertamente es lo que esperamos”. Por su parte, Trump, desde su cuenta de Twitter, afirmó que el informe del FBI reivindicaba a su candidato y dijo que el proceso podría mejorar las posibilidades de los republicanos en las legislativas de noviembre, en las que el control de la Cámara de Representantes y el Senado podría estar en juego. “El trato severo e injusto del juez Brett Kavanaugh está teniendo un impacto increíble en los votantes”, dijo Trump. “La GENTE lo entiende mucho mejor que los políticos”. El magnate neoyorquino caracterizó de mezquinos a los demócratas, y enfatizó que no podrán arruinar la nominación con sus acusaciones no confirmadas.
Las denuncias contra Kavanaugh comenzaron hace un mes cuando la docente y psicóloga Christine Blasey Ford denunció haber sufrido abuso sexual por el magistrado en su adolescencia. Ford acudió hace una semana a contar su versión en la audiencia pública del comité judicial del senado. A esta denuncia, que luego derivó en la investigación del FBI, se sumaron otras dos similares, sobre sucesos que supuestamente ocurrieron en la juventud del nominado.
Mientras la Casa Blanca festejaba los resultados de la investigación del FBI, los demócratas consideraron que la pesquisa tuvo un alcance demasiado restringido. La principal demócrata del Comité Judicial del Senado, Dianne Feinstein, dijo que aún no había tenido acceso a todo el informe, pero que, por lo que había visto, parecía insuficiente para dejar de lado las preocupaciones sobre Kavanaugh. “Parece ser el producto de una investigación incompleta que fue limitada quizás por la Casa Blanca”, dijo a periodistas en el Capitolio. “Lo más importante de este informe es lo que no recoge, ya que el FBI no ha entrevistado ni a la supuesta víctima de Kavanaugh, Christine Blasey Ford, ni al propio juez”, consideró Feinstein. “No comparto con el senador (Chuck) Grassley que el FBI no encontrara indicios de mala conducta”, aseguró, por su parte, el senador demócrata Schumer en una rueda de prensa. Schumer también dijo que la pesquisa había sido demasiado limitada y apuntó a la Casa Blanca como posible responsable. El senador demócrata exigió a la Presidencia que publique el documento en el que ordenó al FBI que realizara esta investigación para conocer si delimitó sus términos.
Una primera votación de procedimiento está programada para el viernes en el plenario del Senado, antes de la votación final prevista para el fin de semana en la Cámara alta, donde los republicanos tienen una escasa mayoría de 51-49. Tras la investigación del FBI dos de los senadores republicanos que dudaban sobre su voto, Susan Collins y Jeff Flake, manifestaron que los hallazgos de las pesquisas federales no confirman los hechos de los que se acusa al nominado a la Corte Suprema. “Esta persona está muy bien calificada: es una persona que cree en los principios del debido proceso, la presunción de inocencia y la disposición para servir. Por lo tanto, el juez Kavanaugh debe ser confirmado el sábado”, dijo Grassley. El senador republicano agregó que hizo todo lo posible para aclarar las dudas de los demócratas. Como suele ocurrir cuando se debate el ingreso de un nuevo juez a la Corte Suprema, las audiencias se transforman en una batalla político-partidaria. La presión social en contra de la confirmación de Kavanaugh creció en los últimos días, a medida que surgían denuncias en su contra, al punto de generar repudios y movilizaciones a lo largo del país.