El presidente Mauricio Macri defendió ayer a su amigo, el jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas, denunciado por recibir 600 mil dólares de Leonardo Meirelles, un cambista brasileño condenado en su país por el pago de coimas. Macri repitió la versión difundida por Arribas y negó que el representante de jugadores de fútbol tuviera vinculación alguna con la empresa Odebrecht, centro del complejo entramado de corrupción investigado en la causa Lava Jato, en Brasil. “No entiendo cómo se relaciona Arribas con Odebrecht”, afirmó el Presidente, quien adelantó que “el día 23” el director de la AFI presentaría documentación aclaratoria del caso. Pese a los reclamos tanto de la oposición como de sus propios socios de la UCR y la Coalición Cívica, Macri no dio señales de apartar al funcionario, tal como había hecho con el titular de la Aduana, Juan José Gómez Centurión, primero denunciado y luego repuesto en el cargo meses después. 

 

En su primer contacto con la prensa luego de sus vacaciones en el sur, Macri respondió sobre los conflictos que rodean a sus amigos y socios. Los defendió a todos. Además de Arribas, justificó al magnate Joe Lewis por los manejos con sus tierras en la Patagonia y también al gobernador Gerardo Morales por la detención arbitraria de Milagro Sala, quien el lunes cumplió un año en prisión preventiva. 

 

“Es muy claro que acá lo que manifiesta Arribas es que vendió un departamento y que un señor, que le pagó un saldo de precio, usó un cambista importante; cambista que tiene miles de clientes, no uno… miles; entre los cuáles ha estado Odebrecht. Por eso el cambista está investigado por haber sido vehículo para pagos de Odebrecht. Es como cualquiera de los cambistas argentinos, en los cuales mucha gente gira plata, a través de él”, respondió ayer Macri en la conferencia de prensa convocada para hablar de las inundaciones sufridas en el interior del país. 

 

El cambista en cuestión no es cualquier cambista. Leonardo Meirelles está condenado a cinco años de prisión por el pago de coimas. Se acogió al régimen de delación premiada en Brasil, donde en el marco de la causa Lava Jato aportó información sobre las operaciones ilegales que hacía para la empresa Odebrecht. 

 

Según una nota publicada por el diario La Nación, en colaboración con el consorcio internacional de periodistas IDL Reporteros, el cambista brasileño utilizó una cuenta en Hong Kong de la “empresa de fachada” RFY Import & Export Limited para realizar cinco transferencias a la cuenta de Arribas en la sucursal de Zurich del Credit Suisse. 

 

El monto total fue de 594.518 dólares, girados en septiembre de 2013. La fecha coincide con el anuncio del relanzamiento de la obra del soterramiento del tren Sarmiento por parte de un consorcio de empresas encabezado por Odebrecht e integrado también por Iecsa –propiedad de Angelo Calcaterra, primo de Macri–. 

 

La respuesta ofrecida por Arribas mediante un breve comunicado incluyó descalificaciones al medio y al periodista que publicó la información, Hugo Alconada Mon. El jefe de Inteligencia negó haber recibido ese dinero y aseguró que sólo recibió un giro de 70.475 dólares como parte de pago de un departamento. Fue exactamente la misma explicación que dio ayer el Presidente. “Arribas va a traer los papeles, el día 23, cuando el brasileño (el supuesto comprador) vuelva de sus vacaciones, demostrando que él compró un departamento y le giró ese dinero, vía Meirelles, que es como creo que se llama; lo cual no entiendo cómo se relaciona Arribas con Odebrecht, ese link todavía yo no lo entendí y mucho menos cómo se relaciona Arribas con Meirelles y con el soterramiento del Sarmiento, obra que entre septiembre y el siguiente año estuvo parada, o sea no hubo tal reactivación de la obra”, insistió Macri, quien además deslizó una queja por el momento en que se difundió la información: “No entiendo dónde está el tema, en una época del año en el cual, lamentablemente, todos estos actores están fuera del hábitat (SIC) porque es época de vacaciones”.

 

La defensa de Macri a quien le alquila su departamento de Avenida Libertador implica un rechazo a los distintos planteos que surgieron incluso desde el oficialismo. Elisa Carrió había presentado una denuncia penal para que se lo investigue mientras que desde la UCR adoptaron distintas posturas. El jefe del bloque de diputados radicales, Mario Negri, reclamó que Arribas se presente en la Justicia para dar explicaciones. El senador Julio Cobos reclamó que sea apartado hasta que aclare su situación, como había ocurrido con el jefe de la Aduana. Otro diputado radical, Héctor “Cachi” Gutiérrez, reclamó que Arribas asista a la comisión bicameral de fiscalización de los organismos de inteligencia para responder preguntas de los legisladores. 

 

La oposición compartió alguna de estas posiciones y fue un poco más allá. Un grupo de diputados encabezado por el jefe de la bancada del FpV, Héctor Recalde, presentó otra una denuncia penal, que recayó en el juez Sebastian Casanello. Y además de pedir su apartamiento, la diputada kirchnerista Teresa García presentó una nota en la bicameral de inteligencia pidiendo que se lo convoque. Por otro lado, Margarita Stolbizer y Graciela Ocaña también pidieron que el funcionario deje el cargo dado que como jefe de Inteligencia podía obstaculizar la investigación.

 

Consultado también por las críticas a la Cancillería por obstáculos en la investigación de los Panamá Papers, Macri aseguró que tanto él como el gobierno están cooperando con la Justicia. “Me encantaría que en algún momento dado el juez diga de una vez por todas que toda esas denuncias que me hicieron son mentiras, porque ni era accionista, ni cobré dinero, fui director cuatro meses, con lo cual no tenía por qué haber declarado esa sociedad en mí declaración jurada de qué es lo que yo tenía como Jefe de Gobierno”, sostuvo.