Tres terremotos de más de 5 grados en la escala de Richter se registraron esta mañana en el centro de Italia y se sintieron con fuerza en Roma, ciudad ubicada a unos 100 kilómetros del epicentro. Los sismos sacudieron también Amatrice y Ascoli, las localidades que había quedado en ruinas tras los terremotos de agosto pasado, aunque esta vez sólo causaron al daños leves.

El primer sismo fue registrado a las 10.25 locales (6.25 de Argentina) y tuvo el mismo epicentro que el terremoto del pasado 24 de agosto, que dejó un saldo de casi 300 víctimas fatales y numerosos daños. La información fue confirmada por la agencia de Protección Civil de ese país.

Según el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, este primer terremoto tuvo una magnitud de 5.3 grados y se originó entre las localidades de Aquila y Reti, a 10 kilómetros de profundidad. Menos de una hora más tarde se sintieron dos réplicas: la primera fue de 5.4 grados y la segunda hizo alcanzó los 5.5 grados e hizo temblar varios edificios de la capital durante algunos segundos. 

Tras el primer movimiento debieron ser evacuadas las estaciones de las líneas A, B y C de Roma, y muchas escuelas de la capital cerraron sus puertas.

Por precaución se evacuaron escuelas en Rieti, en medio de dificultades por la nieve que desde hace semanas cae en el centro y norte de Italia. Se registraron "pequeños desprendimientos" en edificaciones en las localidades de Amatrice y Ascoli, dos de las más golpeadas por el sismo de agosto pasado.

La serie de réplicas se sintió también en las zonas de Las Marcas y La Toscana, e incluso usuarios de redes sociales reportaron movimientos en la isla de Sicilia.