El presidente saliente de Estados Unidos Barack Obama, defendió ayer su decisión de conmutar la pena a la exsoldado Chelsea Manning, quien en 2010 filtró un número récord de documentos secretos a WikiLeaks. 

Obama, declaró que “se hizo justicia’’ en el caso de Chelsea Manning, justificando su decisión. “Seamos claros: Chelsea Manning ya cumplió una dura sentencia en prisión’’, dijo el presidente en su última rueda de prensa en la Casa Blanca, opinando que la condena de 35 años de cárcel era “desproporcionada’’ con relación a otras sanciones en delitos similares. “Vi los detalles de este caso de la misma manera que otras conmutaciones y perdones y sentí a la luz de todas las circunstancias que conmutar su sentencia era totalmente apropiado’’, dijo Obama. “Siento que se hizo justicia’’, apuntó. “Ha pasado una significativa cantidad de tiempo” en la cárcel, recordó Obama al explicar la decisión, la cual dijo, se sintió “muy cómodo” cuando la tomó.  Así, Manning, una exanalista de inteligencia militar que se llamaba Bradley  Manning y que comenzó un tratamiento de cambio de sexo para ser mujer en su cárcel militar de Kansas, será liberada el próximo 17 de mayo.

 Manning fue arrestada en 2010 por haber transmitido más de 700.000 documentos confidenciales al sitio WikiLeaks. Entre los documentos se incluían registros militares de las guerras en Irak y Afganistán y cables diplomáticos con información sensible, y en ocasiones vergonzosa, sobre líderes mundiales. Los documentos clasificados incluían estimaciones más altas que las reconocidas de las muertes civiles en Irak y el video de un francotirador que disparaba repetidamente desde un helicóptero contra objetivos que más tarde se supo eran periodistas de la agencia de noticias Reuters y un grupo de persona que se acercó para socorrerlo. 

Manning se declaró culpable y en 2013 un tribunal militar le declaró culpable en 20 puntos, entre ellos de espionaje y traición, imponiéndole la pena más elevada decretada en Estados Unidos a un informante. Un día después, Manning anunció que siempre se sintió mujer y que a partir de entonces quería vivir como tal. 

Las condiciones penitenciarias impuestas a Manning fueron de una dureza inusitada. Fue traslada en varias ocasiones y vivió como única mujer en una cárcel militar de hombres. Desde las organizaciones de derechos humanos consideraban su situación como una especie de tortura. Intentó quitarse la vida en dos ocasiones y en septiembre pasado hizo una huelga de hambre hasta que el Ejército le garantizó una operación para el cambio de sexo. 

Según los abogados de Manning, Nancy Hollander y Vince Ward, la condena que se impuso por difundir información fue exagerada, ya que la soldado no infligió ningún daño a Estados Unidos. Con la decisión de Obama “se hace justicia”, afirmaron. 

 En la rueda de prensa de ayer Obama también comentó, que no presta atención “a los tuits de (Julian) Assange”, fundador de WikiLeaks, quien dijo que está dispuesto a ir a Estados Unidos si se garantizan sus derechos. Además, Obama remitió a los periodistas al Departamento de Justicia para “cualquier investigación criminal, formulación de cargos o asuntos de extradición que puedan surgir” con respecto a Assange.

El australiano Assange, de 45 años, lleva más de cuatro años viviendo en la embajada de Ecuador en Londres para evitar su detención por las autoridades británicas, que a su vez lo extraditarían a Suecia, donde es buscado por acusaciones de presunta violación “en grado menor”, pese a que nunca fue formalmente acusado.

Sin embargo, Assange teme que de allí sería a su vez extraditado a Estados Unidos, donde se enfrentaría a una larga pena de cárcel por la publicación de documentos. 

Aunque previamente se había declarado dispuesto a entregarse y ser extraditado a Estados Unidos si Obama indultaba a su informante, Assange seguirá por el momento refugiado en la embajada de Ecuador en Londres tras la conmutación de la pena de Manning. Según dijo el abogado sueco de Assange, Per Samuelson, todavía es muy pronto para decir si su cliente permitirá ser extraditado a Estados Unidos.  “Assange consideró la liberación de Manning un gran éxito parcial no sólo para Manning sino también para Wikileaks y para su  propia rehabilitación”, dijo Samuelson. Sin embargo, “mientras dure la amenaza de Estados Unidos contra Assange, aceptará su asilo político”.

Las autoridades estadounidenses confirmaron que el FBI investiga la publicación de información sensible a través de WikiLeaks a raíz de las filtraciones de Manning, si bien no revelaron  si Assange fue acusado formalmente en un tribunal secreto. 

Los portavoces de la Casa Blanca aseguraron al Washington Post que la decisión de Obama de indultar a Manning no tiene nada que ver con el anuncio de Assange de entregarse si así lo hacía.