Un grupo de 120 policías de la Ciudad que reclaman volver a la Federal tomaron un sector del Ministerio de Seguridad porteño para exigir que se cumpla un compromiso que había realizado el secretario de Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro, para reincorporarlos a esa fuerza. “El plazo venció el martes y no cumplieron nada”, dijo uno de los voceros, Juan José Mármol, quien informó que los policías pasaron la noche del jueves “en el hall del edificio, y se vivieron momentos tensos a la madrugada cuando nos quisieron desalojar”. Pasado el mediodía, los uniformados levantaron la medida tras la convocatoria de una reunión del jefe de la Federal, Néstor Roncaglia, a quien consideran su “autoridad natural”. En tanto la cartera de Seguridad, a cargo de Martín Ocampo, negó la toma del lugar, sostuvo, a través de un comunicado, que no hubo “ninguna situación de conflictividad entre efectivos”, y redujo el hecho a un reclamo de 20 agentes.
El conflicto, que viene desde comienzos de año, se da en el marco del traspaso de 19.300 agentes de la Federal a la órbita de la Ciudad, en el que unos 1000 uniformados quieren ser reintegrados a la fuerza de seguridad nacional.
Según Mármol, un policía cesanteado que oficia de vocero de los reclamos, la ocupación del edificio ubicado en Regimiento Patricios al 1000, en Barracas, comenzó el jueves, alrededor de las nueve de la mañana. “El personal autoconvocado ocupó el Ministerio, pero mantuvo su labor cotidiana. Primero fueron unos 90, pero se fueron sumando a lo largo del día, hasta sumar unos 120. Llegaban, y a la hora de tomar servicio se retiraban; entonces, venían los salientes (los que dejaban el turno). Por eso se mantuvo esa cantidad a lo largo de la jornada”, explicó el vocero, que remarcó que “lo único que queremos es que se cumpla lo pactado”.
Los policías que participaron de la toma estaban armados porque continuaban prestando servicios, explicó Mármol a PáginaI12, y contó que “a medianoche, sin ninguna respuesta, la gente no se fue. Estaban muy enojados porque requerían una solución y decidieron quedarse. Y ellos (el Ministerio) desplazó una unidad de contención antimotines para desalojar el hall”. “Fueron momentos de mucha tensión, con los ánimos muy alterados”, remarcó.
El reclamo para ser devueltos a la Federal, que incluyó marchas y petitorios a lo largo del año (ver aparte), está fundado, según el vocero, en una serie de problemas que sufre el personal transferido: queda a nivel jerárquico por debajo de la policía de la Ciudad; trabajan más horas por la misma plata; muchos de los policías que revistaban en el interior y que tienen su núcleo familiar en las provincias, al pasar a cumplir su labor en la ciudad, se ven imposibilitados de ver a sus familiares porque la modalidad actual de trabajo los deja sin francos largos para viajar. “Lo único que se hizo fue diezmar al personal con acciones administrativas; cesantías, cambios de horario, sanciones”, dijo Mármol.
Según el vocero, “se dijo que el personal que está reclamando es gente que la Federal no quiere. Pero la Federal dijo que no podía disponer porque están bajo convenio con Ciudad”, sostuvo, y señaló que “la medida se levantó porque intervino Roncaglia y mostró que hay disposición para que vuelvan a la fuerza. Va a haber una reunión en el Departamento Central de Policía, en el que se va a analizar el reintegro”, adelantó.
En este sentido, según una fuente oficial, la Federal estaría dispuesta a analizar los legajos que la Policía de la Ciudad envíe. Hasta el cierre de esta edición, no hubo información oficial que confirme esta decisión.
El Ministerio que comanda Ocampo le bajó el tono a la protesta, y en su notificación explicó que “el único suceso real es que, de un listado reciente de 300 policías de la Ciudad que pidieron el pase a la Policía Federal Argentina, en una primera revisión de sus legajos cerca de 20 no fueron admitidos por dicha fuerza. En consecuencia, esos 20 efectivos se acercaron a reclamar a las instalaciones del Ministerio”. Remarcó que “mas de 600 policías ya han sido traspasados a la PFA y 400 de esa fuerza fueron incorporados a la Policía de la Ciudad... y que es mínimo el número de casos que presenta dificultades”. Unas líneas antes, sostuvo que la información que circuló en redes (también hubo móviles de radio que entrevistaron a los ocupantes) sobre la toma “es falsa y la desmiente categóricamente”.