En función de promover “la lucha por el derecho social a la enseñanza y la práctica de los deportes, los juegos ancestrales, la educación física, la recreación y la actividad física”, como aporte fundamental a mejorar la calidad de la vida de los ciudadanos, un conjunto de entidades, universidades y distintas instituciones de América latina y el Caribe se reunió días pasados en el Palacio San Martín de la Cancillería para exigir a tal fin “más presupuesto para los ámbitos municipales, provinciales, nacionales y regionales”.
En ocasión de la realización simultánea del I Foro de Diplomacia Deportiva, del IV Foro Latinoamericano Juegos Ancestrales de los Pueblos Originarios e Indígenas, y del X Foro Mercosur Latinoamericano Democratización del Deporte, la Educación Física y la Recreación, se discutió “la importancia de crear programas y recursos” que, además del alto rendimiento deportivo, atiendan otros sectores, como la educación física escolar, el deporte social y barrial, el deporte para personas con discapacidad, los adultos mayores y las personas que habitan en barriadas vulnerables.
“Dado que América no fue descubierta por España ni por Europa, pues nuestros pueblos ya habitaban y producían en nuestro suelo, entendemos los juegos ancestrales de los pueblos originarios e indígenas como un aporte fundamental al patrimonio cultural de nuestro continente”, se enfatizó desde los foros, en un fuerte pronunciamiento “contra un contexto regional que promueve un discurso y una práctica de desmantelamiento del Estado, que atiende los reclamos de las finanzas y del FMI”.
Redes y Observatorios Latinoamericanos presentes bregaron “por jerarquizar el lugar de las mujeres, promoviendo la igualdad de oportunidades en todos los ámbitos del deporte”, al tiempo que mostraron “preocupación” porque muchos gobiernos de la región están dejando de destinar presupuestos a la investigación académica en universidades e instituciones de formación docente dedicadas al deporte.
Por último, para priorizar al conjunto de la ciudadanía, los distintos foros apuntaron sobre la necesidad de que existan espacios de debate y participación para la elaboración de políticas públicas que jerarquicen “el lugar de la educación física en los sistemas educativos”, que visibilicen asimismo “la labor en clubes de barrio, en las plazas y parques públicos, en los centros educativos y los municipios”.
