El presidente Mauricio Macri visitó ayer de sorpresa Rosario para dejar inaugurado un tramo de avenida Circunvalación que conecta a la ciudad con Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, junto al ministro de Transporte, Guillermo Dietrich. Estuvo poco menos de una hora: dio un discurso de 13 minutos, estuvo acompañado de cinco trabajadores viales y cuando se acercó a un grupo de periodistas, un colega le preguntó por la situación social a fin de año. “Falta mucho, hay que trabajar mucho de acá a fin de año", respondió un tanto molesto. Y abandonó el lugar.