El presidente de México, Enrique Peña Nieto, registró los peores índices de aprobación de su gestión desde que asumió en 2012. Una encuesta le concede apenas el 12 por ciento de imagen positiva, mientras que la desaprobación llegó al 86 por ciento, arrastrada por la suba en el precio de los combustibles del último mes, la pobreza y la violencia que sacude al país.
La encuesta del diario Reforma registró un aumento de 13 puntos porcentuales en la imagen negativa respecto del último sondeo, de diciembre pasado. Tras cuatro años de gobierno (Peña Nieto asumió en diciembre de 2012 por un período de seis años, que culminará el 1 de diciembre de 2018) los resultados de su gestión muestran un país sumido en la pobreza y en el fracaso de la lucha contra el narcotráfico. La desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa también ha arrastrado al oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI) al tercer puesto en intención de voto de cara a las elecciones del año próximo.
El Movimiento Regeneración Nacional (Morena), que lidera Andrés López Obrador, aparece primero con el 27 por ciento de intención de voto, seguido por el conservador Partido Acción Nacional (PAN), con el 24 por ciento. El PRI solo cuenta con el 17 por ciento.
El sondeo se complementa con los efectos del aumento en los combustibles, el llamado "Gasolinazo", que el gobierno presentó como la única alternativa a un recorte de los planes sociales. Se trata de un alza que oscila entre el 14 y el 20 por ciento, y que provocó un 85 por ciento de rechazo entre los encuestados.
Casi un 60 por ciento de los encuestados estimó que su familia se verá "muy afectada" por el aumento del combustible, el 26 por ciento "algo afectada" y el 12 por ciento "poco afectada”. Sólo el 3 por ciento sostuvo que su familia "no se verá afectada".