En Argentina, la tasa de mortalidad infantil –que indica la cantidad de niños de menos de un año fallecidos por cada 1000 niños nacidos vivos– fue de 9,7 en 2015 de acuerdo con las Estadísticas Vitales de ese año presentadas por el ministerio de Salud de la Nación, que destacó que es la primera vez en 25 años que el indicador descendió a un dígito. En la medición anterior, correspondiente a 2014, la tasa de mortalidad infantil había sido de 10,6. El indicador continúa, así, el descenso progresivo que registra desde al menos 1990.
El distrito con el mejor desempeño fue la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde la mortalidad infantil fue de 6,4 por cada 10 mil nacidos vivos, seguido por la provincia de Chubut, con 6,9, y Tierra del Fuego, con 7,6. En tanto, en Corrientes el indicador trepó hasta el 14,5, a lo que siguió el caso de Formosa, con 12,6, el de Tucumán, con 12,4, los de Salta, con 11,8, La Rioja, con 11,3, Catamarca, con 11, Santa Cruz, con 10,9, Jujuy con 10,7 y Entre Ríos, con 10,4.
La mayoría de los niños nacidos vivos fueron dados a luz por mujeres de entre 20 a 24 años (189.542), mientras 175.362 nacieron de mujeres de entre 25 y 29 años, 155.082 de mujeres de entre 30 y 34. Por otra parte, 108.912 niños fueron hijos de mujeres de entre 15 y 19 y 2787 de niñas que no llegaban a tener 15 años al momento del parto. En tanto, 98.623 chicos nacieron de madres de entre 35 y 39 años, 25.346 de mujeres de entre 40 y 44 y 1755, de mujeres de más de 45. El distrito con mayor cantidad de niñas menores de 15 convertidas en madres fue la provincia de Buenos Aires (440), al igual que el de la mayoría de las madres de entre 15 y 19 (33.500).
La brecha entre las mujeres que vivían en pareja al momento de parir y las que no es amplia: mientras que las primeras fueron 622.491 (la mayoría de ellas, 434.967, ternía entre 20 y 34 años), las segundas eran 105.092 (también en este grupo la mayoría, 62.503, tenía entre 20 y 34 años). De todas esas mujeres, 214.157 habían completado el nivel de instrucción secundario y polimodal (177.544 lo tenían incompleto), mientras que 150.296 contaban con educación primaria completa (34.737). Por lo demás, 101.881 tenían educación terciaria o universitaria completa, y 52.493 incompleta.
De los 770.040 niños nacidos vivos en 2015, 307.498 registraron un peso de entre 3000 y 3490 gramos al momento de nacer, 262.985 tuvieron más de 3500 gramos, 133.552 oscilaron entre los 2500 y los 2999, mientras que 35.092 lo hicieron entre los 2000 y los 2499. El intervalo de peso de entre 1500 y 1999 gramos registró 11.035 nacimientos, el de entre 1000 y 1499, 5375; el de entre 500 y 999 gramos, 2888, mientras que el registro de menos de 500 gramos se dio en 268 casos.
En cuanto a lo que el estudio define como “número de orden de nacido vivo”, la mayoría de los niños eran primeros hijos (304.816), seguidos por los segundos hijos (232.812), los terceros (119.578), los cuartos (52.209), los sextos o más (23.445) y los quintos (22.958).
Por otra parte, la mortalidad materna –que registra tasa de mujeres fallecidas durante embarazo, parto y puerperio por cada 10 mil nacidos vivos en todo el país– fue de 3,9, lo que significó un ascenso leve respecto de los datos de 2014, cuando fue de 3,7. En ese sentido, los mejores resultados fueron registrados en las provincias de Santa Cruz (1,6), Santa Fe (1,9), La Pampa (1,9) y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (1,9). Por su parte, los registros más elevados se realizaron en Salta (8,1), Jujuy (7,5) y Chaco (7,3).