Un grupo de chicas adolescentes juega a un tradicional juego de terror oral sobre intercambiar predicciones macabras, pero el bullying mete la cola y una cosa lleva a la otra: el juego pivotea en el mito urbano y se convierte en una extraña seguidilla de curiosas muertes anunciadas. Así es el camino narrativoque recorre –con buen resultado– Light As a Feather, la serie cuyos episodios se estrenan cada sábado en la plataforma online Hulu, y que rescata y glorifica el subgénero del terror adolescente. El grupo de estudiantes que se mete en algo que no conoce ni entiende del todo y que supone excitación y riesgo, alegoría posible del crecimiento, es un recurso clásico de los relatos adolescentes, que viene siendo explorado tanto en clave natural (por caso, en la serie Riverdale) como sobrenatural (en la saga Crepúsculo, sin ir más lejos). Segmentada en diez episodios breves, de alrededor de 20 minutos cada uno, Light As a Feather, parte de esa clase de esquema para desatar una inusual cacería intragrupal, donde sobrevuela el fantasma del bullying a partir de la llegada de una chica nueva a la pandilla y donde las muertes adolescentes alimentan la idea del creepypasta (relatos anónimos de terror, presuntamente reales, difundidos a través de Internet). La historia de Light As a Feather está basada en un libro de la autora estadounidense Zoe Aarsen, quien dialogó con PáginaI12 sobre la adaptación de su novela al formato de webserie.
–¿Qué distingue una historia de terror para adolescentes de otras variantes de historias de terror?
–Las historias de terror para adolescentes tienden a acercarse a temas vinculados con el crecimiento y el paso del tiempo: la primera vez que te enamorás, la primera vez que arruinás algo en tu vida, la primera vez que tenés una pelea con un amigo o un desacuerdo con tus padres... Son eventos realmente importantes que les ocurren a las personas en la adolescencia. Por esta razón, creo que en las historias de terror para adolescentes un elemento realmente poderoso es la responsabilidad. Los personajes de películas clásicas de este subgénero, como Sé lo que hicieron el verano pasado o Pesadilla, saben que hicieron algo malo, o que sus padres hicieron algo malo, y ahora están obligados a pagar el precio. Mientras que el horror adulto a menudo tiene que ver con un personaje atormentado, castigado o condenado por sus vicios, el horror adolescente suele tener que ver con chicos que enfrentan las consecuencias de explorar sus nuevos roles como adultos. Light As a Feather va en esa dirección. Los personajes principales son chicas que saben que están jugando un juego estúpido y que tal vez ya están un poco grandes para juegos, pero lo hacen de todos modos. Y cuando comienzan a pensar que tal vez la chica nueva les ha hecho un embrujo, se sienten avergonzadas por la idea y eligen no pedir ayuda por miedo a que la gente piense que están locas, paranoicas. La otra cuestión, más profunda, tiene que ver con la pérdida que sufre todo adolescente, en este caso, con cómo el personaje principal, McKenna, trabaja psicológicamente el dolor del sobreviviente, tras haber perdido a su hermana, de niña.
–En Light As a Feather hay un grupo de amigas adolescentes, una chica nueva, desconfianzas, recelos… ¿Cómo trabajó narrativamente sobre el bullying?
–Light As a Feather no tiene un enfoque clásico del bullying sino que la cuestión toma otras formas, con las que muchos niños en la actualidad están familiarizados. Olivia, la chica más popular de la escuela, es una chica popular atípica, porque suele ser generosa y amable. Sin embargo, sus amigas saben que podría enojarse y posiblemente expulsarlas de su círculo si no encuentran pareja. McKenna, a su vez, incurre en otra forma de acoso al darle la espalda a sus viejas amistades, que no son bien vistas en su nuevo grupo de amigas. Más adelante en la historia, todo el grupo de amigas sufre cierto bullying escolar cuando los demás chicos se burlan de ellas por tener miedo o por jugar con maldiciones. Hoy los chicos lidian con muchas formas de bullying y a veces las más dolorosas pueden ser las menos obvias, como ser rechazado en las redes sociales o simplemente no ser invitados a participar en algún evento.
–El nombre de la serie proviene de un juego popular (“Liviano como una pluma, rígido como una tabla”). ¿Cómo llegó a escribir sobre esto?
–Es un juego que se ha jugado durante siglos, desde que la Peste Negra devastó Europa. Ya formó parte de películas como The Craft y de series de televisión como American Horror Story: Coven. Cuando era chica, me mudé de Chicago a Salem, Massachussets, y me invitaron a jugar el juego en una fiesta de cumpleaños. Yo había sido criada como católica y estaba un poco asustada por la premisa del juego, que básicamente consiste en que un jugador, el narrador, haga predicciones sobre cómo morirán los demás participantes del juego. Y luego, supuestamente, si alguna de las predicciones es cierta, el jugador afectado se volverá liviano y flotará en el aire, como levitando. Mi recuerdo de esa noche es que el juego realmente funcionó y que levantamos varias chicas sobre nuestras cabezas mientras jugábamos... No sé si habrá sido exactamente así, yo estaba en quinto grado, pero resultó un evento suficientemente poderoso en mi vida como para llevarlo conmigo hasta la edad adulta... y como para escribir sobre él.