Con tranquilidad y medida confianza a partir del resultado favorable de la ida, Boca intentará sellar hoy desde las 21.45 en el estadio Parque Allianz de San Pablo la serie con Palmeiras, en un emocionante duelo entre históricos, para avanzar a la final de la Copa Libertadores. Al igual que lo ocurrido ayer con el técnico riverplatense Marcelo Gallardo, el equipo xeneize, que juega su intención de igualar a Independiente como el club con más trofeos (7) de América, no podrá contar con su entrenador Guillermo Barros Schelotto en el banco de suplentes (ver aparte). Pero tiene un 2-0 a su favor y sólo una catástrofe deportiva lo dejaría afuera. Así, el mellizo Gustavo será el encargado de dirigir a un plantel en el que el gran héroe de la ida, Darío Benedetto, comenzará de nuevo en el banco, con Ramón Abila de titular. Toda la presión estará entonces en manos del Palmeiras, que lleva mucho tiempo esperando llegar a una final copera, está en plena luna de miel con el DT, Luiz Felipe Scolari, y es líder del Brasileirao.
La Copa Libertadores es el máximo objetivo de Boca. Ya la ganó seis veces (1977, 1978, 2000, 2001, 2003 y 2007), pero la última fue hace once años, acaso demasiado tiempo para una institución de su talla, que llegó a la fase de los mejores cuatro luego de eliminar a Libertad de Paraguay en octavos de final y al Cruzeiro de Brasil en cuartos.
Rossi; Jara, Izquierdoz, Magallán, Olaza; Nández, Barrios, Pablo Pérez; Villa, Pavón y Abila serían los once elegidos en la búsqueda xeneize por cristalizar su pase a una nueva final, ante un Palmeiras que aún confía en remontar jugando en casa en Brasil.
Con dos goles de ventaja, Boca en principio llega a San Pablo como favorito al duelo de vuelta de semifinales contra el Verdao. “No hay que relajarse”, avisó Benedetto, autor del doblete en La Bombonera cuando el trámite era cerrado y condenado terminar igualado sin tantos. “Estamos a un paso de la final y debemos pelear todos juntos. Tenemos que estar concentrados los 90 minutos”, remarcó el delantero, uno de los pocos jugadores –la mayoría prefirió no hablar– que respondieron a la prensa que esperaba ayer en el aeropuerto. Quien sí dialogó con los periodistas fue el presidente del club de la Ribera, Daniel Angelici: “Es un partido difícil, sabemos que tenemos un buen resultado, pero jugamos ante un gran rival”, sostuvo el directivo con mesura.
Del otro lado, Felipao confía, cuenta con todo su plantel y jugaría con el mismo once que formó en Buenos Aires. “Será un partido complicado y Boca arriba ganando. Pero vamos a recomponernos y tratar de revertir el partido en casa, con apoyo de nuestra gente y aún más entrega. El estadio va a estar lleno y necesitamos que los hinchas nos empujen, porque los jugadores están disputando muchos partidos decisivos seguidos”, dijo el DT brasileño, que también dirigía al Palmeiras cuando conquistó su única Libertadores en 1999 y a quien el Boca de Carlos Bianchi arrebató la que pudo haber sido su segunda Libertadores en la final de 2000.
Para lograr la remontada, el Verdao deberá soportar el cansancio del final de la agotadora temporada brasileña. Ya lo hizo el último sábado tras conseguir un importante empate ante el Flamengo (1-1), su perseguidor en la lucha por la liga, que dejó el título casi sentenciado en el Maracaná.
Copa Libertadores
PALMEIRAS: Weverton; Mayke, Luan, G. Gómez, Barbosa; Dudu, Willian, Bruno Henrique, Moisés (o Lucas Lima), Melo; Borja. DT: Luiz Felipe Scolari.
BOCA: Rossi; Jara, Izquierdoz, Magallán, Olaza; Barrios; Villa, Nández, Pérez, Pavón; Abila. DT: Gustavo Barros Schelotto.
Estadio: Parque Allianz.
Arbitro: Wilmar Roldán (Colombia).
Hora: 21.45. TV: Fox Sports.
* Partido de vuelta por los cuartos de final.