La Justicia llamó a prestar declaración indagatoria a Eduardo Miragaya y Santiago Viola, quienes están acusados de intentar apartar al juez Sebastián Casanello de la causa en la que investigaba a Lázaro Báez. El juez federal Luis Rodríguez los convocó como imputados de armar testigos falsos para favorecer a Báez. Ellos habrían aleccionado a militantes kirchneristas para decir que habían visto al juez federal Sebastián Casanello en la quinta de Olivos cuando la ocupaba Cristina Kirchner.

Por ello, el 21 y 22 de noviembre serán indagados Santiago Viola, ex abogado de Báez, y el fiscal Eduardo Daniel Miragaya, que trabajó para la AFI, acusados de instruir falsos testigos para sacar al juez Casanello de la causa conocida como la ruta del dinero K. Por esta investigación, Báez está preso y en juicio oral, acusado de blanquear fondos de la corrupción.

Ambos serán indagados a pedido del fiscal Carlos Stornelli y del propio Casanello. Ese proceso se desarrolla en paralelo con el juicio oral y público que empezó esta semana contra Báez por haber blanqueado 60 millones de dólares. Lo que se investiga es un complot para apartar a Casanello de esta causa cuando estaba en su momento de mayor tensión, buscando testigos fraudulentos que dijeran que lo habían visto en Olivos. El plan casi da resultado. De hecho, la Cámara Federal ordenó una investigación pero concluyó que no había evidencias de esta situación. Los acusados son Miragaya, un fiscal que con el gobierno de Cambiemos integró las filas de la AFI, y el abogado Viola, presunto instigador.