El Senado de Estados Unidos confirmó ayer la designación del general James Mattis como Secretario de Defensa, en la primera ratificación de un miembro del gabinete del nuevo gobierno de Donald Trump. El ex jefe de la Infantería de Marina, de 66 años, es una de las personalidades menos controvertidas de los nominados al nuevo gabinete. La normativa vigente en Estados Unidos dicta que un funcionario de las Fuerzas Armadas debe pasar por lo menos siete años en retiro efectivo para poder asumir la función de Secretario de Defensa, aunque Mattis lleva solamente cuatro años en esa situación.
Por ello, el primer documento firmado por el presidente Trump este viernes fue un decreto exonerando a Mattis de la obligatoriedad de los siete años en retiro efectivo, documento que abrió las puertas para su inmediata confirmación. Trump también firmó las nominaciones del resto de los integrantes de su gabinete, que aún deberán ser aprobados por el Senado.