El Partido Justicialista (PJ) sigue sumando voluntades. En el camino de la unidad planteado como objetivo por la conducción partidaria, se incorporó formalmente al diputado Felipe Solá y a los sindicalistas Héctor Daer, Hugo Moyano y Ricardo Pignanelli. “Estamos logrando juntar a todo el arco gremial. Venimos muy bien”, señaló el presidente del PJ, José Luis Gioja, a PáginaI12 anticipando que “la semana que viene lo sumamos a Hugo Yasky”, líder de la CTA y a la Corriente Federal de Trabajadores. “No queremos que quede ni un solo amarillo después del 2019 y para eso vamos hacia el armado de un gran frente nacional”, agregó el sanjuanino con las elecciones presidenciales del 2019 entre ceja y ceja.

“Tenemos que seguir trabajando para que la unidad del peronismo sea sólida y bien amplia, para eso tenemos que seguir sumando a compañeros y compañeras que no forman parte de la conducción del partido y que tengan la firme vocación de construir un gran frente político opositor a este gobierno”, señaló Gioja en sus primeras palabras al abrir el encuentro de la Mesa de Acción Política junto con la Mesa Ejecutiva. El PJ continúa convenciendo dirigentes que se habían retirado de la vida partidaria por diferencias con el gobierno anterior, pero la debacle social y económica que va a dejar el macrismo facilitó la tarea para cerrar filas. Así fue que presentó ayer como nuevos integrantes de la mesa y del PJ a Felipe Solá, uno de los anotados en la carrera presidencial, al triunviro de la CGT Héctor Daer, a los secretario generales de Camioneros, Hugo Moyano, y de Smata, Ricardo Pignanelli. “El peronismo dividido es funcional a Mauricio Macri”, señaló Daer en su intervención sin dejar de hacer notar que el macrismo estaba trabajando para eso.

Con el año electoral pisando los talones, la conducción del PJ tuvo más logros en los últimos meses que en los últimos años. Después de perder la presidencia y la provincia de Buenos Aires, bastión histórico del peronismo durante 27 años ya en democracia, los peronistas que fueron tomando distancia del gobierno kirchnerista comenzaron a evaluar la vuelta. Las elecciones del 2015 y 2017 fueron un aviso de qué podría pasar en las presidenciales si continuaban ofreciendo en el cuarto oscuro cada cual su lista por separado. La oleada neoliberal y la persecución a opositores que aplicó el macrismo convenció más rápido a unos que otros que todavía confían en el endurecimiento del discurso para poder ser candidatos presidenciales como el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey y el senador rionegrino Miguel Angel Pichetto, que optaron por mostrar un espacio propio por fuera del PJ, aunque por ahora solo fue una foto.

“Siento una inmensa alegría y me reconforta, personalmente, volver a entrar a esta sede del PJ Nacional”, comenzó diciendo Moyano que había renunciado en el 2011 a la presidencia del PJ y a la participación dentro del partido. “Con el peronismo unido, con la fuerza de los trabajadores, de las mujeres, de los estudiantes, y de todos los que se opongan a este gobierno, que es anti pueblo, tenemos que sacar del poder a estos que nos gobiernan”, aseguró el dirigente camionero en la mesa presidida por Gioja. “Están más pendientes de lo que les dicen desde Washington que de lo que pasa acá, con los jubilados, con los comerciantes, con los industriales y con las economías regionales”, agregó el ex líder cegetista.

La mesa tuvo una importante asistencia de dirigentes peronistas. El pampeano y coordinador de la mesa Rubén Marín, el presidente del PJ bonaerense Gustavo Menéndez, el intendente de Malvinas Argentinas y uno de los vicepresidentes nacionales del partido, Leonardo Nardini, el vicepresidente del PJ, Daniel Scioli, y el diputado y ex intendente de La Matanza, Fernando Espinoza. Además los diputados Cristina Alvarez Rodríguez, Eduardo Wado De Pedro, el sanitarista Gines González García, el ex gobernador entrerriano Sergio Urribarri, el vicegobernador de Santiago del Estero, José Neder, el senador formoseño José Mayans y la diputada santafesina Silvina Frana, el titular del PJ porteño, Víctor Santa María, entre otros. La semana que viene se sumará Yasky y la CFT. Entre los ausentes estaban los gobernadores de Formosa, Gildo Insfrán y de San Luis Alberto Rodríguez Saá, pero informaron en el PJ que se debió a las medidas de fuerza de los trabajadores de Aerolíneas Argentinas y las cancelaciones de vuelos. Algunos de los puntos discutidos fueron coordinar propuestas e instensificar la militancia puerta a puerta, reforzar la convocatoria para seguir sumando espacios peronistas que estén por fuera todavía, y se planteó que la gente empieza a preguntar cuáles son las propuestas para salir de la crisis por lo que deberían comenzar a darle forma a un programa político del peronismo.

“Nosotros sentimos un reclamo muy fuerte de unidad que viene desde la gente en la calle, del pueblo para arriba, en el sentido de que nos dejemos de jorobar y nos unamos. Hay gente desilusionada”, destacó Solá al momento de hablar en la reunión. “Lo central es cambiar el rumbo del país. Lo secundario tiene que ver con discusiones entre nosotros por ambiciones políticas y diferencias. Si hacemos foco en lo central, podemos hacer una unidad creíble, en serio”, indicó poniendo el foco en los temas centrales sobre los que trabaja la mesa de Acción política: unidad y proyecto político.