La abogada Laura Casuso, que representaba a dos supuestos narcos brasileños, fue asesinada de ocho balazos en la ciudad paraguaya de Pedro Juan Caballero. Murió poco después en el Hospital Regional del departamento de Amambay. El crimen quedó registrado por una cámara de seguridad.
"Desde el Hospital Regional de Pedro Juan Caballero les puedo decir que estamos muy tristes. Estábamos realmente esperanzados que pudiera aguantar el proceso quirúrgico", señaló Hugo Goncalvez, director del centro de salud, quien confirmó que la primera operación a la que había sido sometida la abogada radicada en Brasil había sido “un éxito” a pesar de que su estado era “muy grave”.
Casuso tenía 54 años, y había viajado a Paraguay para representar a Jarvis Chimenes Pavao y a Marcelo Pinheiro, “Piloto”, acusado de ser el líder del Comando Vermelho, el mayor grupo narco de Brasil. Pavao, por su parte, había sido extraditado a Brasil a fines de 2017 para cumplir una condena a 17 años de prisión, tras haber pasado otros ocho detenido en Paraguay, acusado de evasión fiscal y blanqueo de capitales.
“Piloto” fue detenido en Paraguay en diciembre pasado, en Encarnación, luego de haber estado prófugo de la justicia brasileña desde 2007, cuando se fugó de la cárcel.
Para la justicia paraguaya, el asesinato de Casuso se trataría de un ajuste de cuentas. La Policía del país vecino negó cualquier implicancia de sus subordinados en el crimen.