Diego Maradona tildó ayer de “ladrón” al ex árbitro mexicano Edgardo Codesal, quien dirigió la final del Mundial de Italia en 1990, y aseguró que no lo perdonará, ya que lloró “mucho por su culpa”.
En la previa del primer cruce de cuartos de final del ascenso mexicano ante Mineros, el DT de Dorados de Culiacán le dio una entrevista al diario español Marca en la que recordó aquella final ante Alemania. “Mejor no acordarse (de Codesal). Es un ladrón”, afirmó el Diez, que aseguró no importarle el delicado momento de salud que atraviesa el ex árbitro. “No me importa. Lloré mucho por culpa de Codesal. Ojo, tampoco me río de la mala salud de nadie. A nadie le gusta estar enfermo. Pero si le tocó, por algo fue”, dijo.
Maradona, quien en la misma nota se encasilló en un “estilo menottista”, en referencia a César Menotti, aún sin desmerecer lo aprendido con Carlos Bilardo (“de él aprendí menos”, señaló), expresó su felicidad por su presente en Dorados. “Solo recuerdo tanta felicidad entrenando al equipo de donde eran mis padres (Deportivo Mandiyú de Corrientes). Ese fue un gran sentimiento porque ambos estaban vivos entonces”, recordó Diego.
El equipo de Culiacán recibirá hoy a la medianoche de nuestro país a Mineros de Zacatecas por la ida de los cuartos de final de la liguilla por el ascenso a la primera división de México. Dorados, que terminó en la séptima posición en la temporada regular, enfrentará a Mineros, equipo dirigido por el santafesino Andrés Carevic (ex Boca), que finalizó segundo. La revancha se jugará el sábado en Zacatecas.
Desde que Maradona se hizo cargo de Dorados, el equipo de Sinaloa ganó 6 partidos, empató uno y perdió el restante.