La inflación en la ciudad de Buenos Aires fue del 5,3 por ciento en octubre y acumuló un alza del 38,2 por ciento en lo que va del año, informó ayer la Dirección General de Estadística y Censos porteña. La variación de precios de octubre se enfocó en alimentos y bebidas no alcohólicas, vivienda, agua, electricidad, combustibles, transporte y salud, que en conjunto “explicaron el 64,1 por ciento de la variación del nivel general”. La variación interanual medida a octubre fue de 44,6 por ciento, lo que equivale a una aceleración de 5,1 puntos porcentuales respecto del mes previo (39,5 por ciento interanual en septiembre). El año se encamina a cerrar cerca de la marca de 50 por ciento.
El máximo de inflación de la era Cambiemos en la ciudad de Buenos Aires se registró en abril de 2016, con 6,5 por ciento. Septiembre pasado marcó 6,0 por ciento por un traslado de “segunda vuelta” de la devaluación de agosto, que impactó fuertemente en los precios de los alimentos. Esta es la principal diferencia con el salto de abril de 2016, donde los precios de los alimentos se habían morigerado. En octubre el rubro alimentos y bebidas no alcohólicas aumentó 6,7 por ciento. Si se desagrega por grupos, los principales incrementos fueron para leche, productos lácteos y huevos (7,0 por ciento), pan y cereales (7,1 por ciento), carnes y derivados (4,4 por ciento) y aguas minerales, bebidas gaseosas y jugos (8,5 por ciento).
En servicios de vivienda, agua, electricidad y otros combustibles, el incremento promedió el 5,6 por ciento. “Impactó fundamentalmente el alza en la tarifa residencial de gas por red”, señala el ente oficial porteño. Transporte aumentó 5,9 por ciento, impulsado por “la nueva actualización de las tarifas del transporte público de pasajeros que entró en vigencia a partir del 15 de octubre, junto con el arrastre que dejó el incremento de las mismas en el mes previo”. El rubro salud en la Ciudad de Buenos Aires tuvo un incremento en octubre de 6,2 por ciento, el cual se explica “principalmente a los ajustes en las cuotas de medicina prepaga y en menor medida, a subas en los precios de los medicamentos”.