Desde el viernes pasado, a tan sólo algunas horas de la asunción de Donald Trump, en la web de la Casa Blanca empezaron a registrarse cambios que la fueron poniendo a tono con los tiempos que corren y que enfatizan las prioridades de la nueva administración: deportaciones, la construcción de muro en la frontera con México y reforzar la política exterior, entre otras. “Derechos civiles”, “Cambio climático”, “Economía”, “Educación”, “Plan de salud”, temas destacados que figuraban en el sitio con mucha visibilidad durante la administración Obama han sido reemplazados respectivamente por: “Primer plan energético norteamericano”, “Primera política migratoria norteamericana”, “Recuperar empleos y crecer”, “Fortalecimiento de nuestras Fuerzas Armadas”, “Defendiendo nuestras leyes”.
Todas las referencias al cambio climático y al calentamiento global fueron eliminadas de la web gubernamental. Hasta la mañana del día 20 de enero, la página de la Casa Blanca hacía énfasis en el plan conjunto entre Estados Unidos y China para reducir la contaminación y proteger al medio ambiente. Hoy lo que figura en su lugar es el nuevo plan energético del flamante Presidente, quien había asegurado en sus discursos de campaña y más de cincuenta veces en Twitter que el cambio climático es “pura propaganda basura que debemos detener”. El primer mandatario de Estados Unidos se encuentra hoy rodeado de colaboradores que niegan el calentamiento global como Rex Tillerson, CEO de la petrolera ExxonMobil y actual Secretario de Estado, quien ha asegurado que “las emisiones de CO2 tienen un impacto muy difícil de predecir”.
También ha sido eliminada de la web oficial la sección dedicada a los avances recientes en torno a los derechos relacionados con la diversidad sexual. Durante su campaña el millonario republicado había enviado mensajes cruzados al electorado LGBTI. Dijo, por ejemplo, “no tener problemas” con la decisión del Tribunal Supremo estadounidense acerca del matrimonio igualitario y ser “un partidario de la comunidad”, mientras, fortalecía su alianza con un vice rabiosamente homofóbico, Mike Pence, quien, como gobernador de Indiana, había sido el impulsor de la Ley de Restauración de la Libertad Religiosa -que entre otras atribuciones daba la posibilidad a comerciantes y funcionarios públicos de negarse a participar en matrimonios entre personas del mismo sexo- y de otra ley en la aumentaba las restricciones para la realización del aborto.
Otro de los cambios recientes en el sitio de la Casa Blanca es que ya no se puede ingresar a la versión en español, una decisión en consonancia con uno de las tantas ideas que Trump se había preocupado por dejar en claro durante su campaña cuando criticó Jeb Bush, hermano del ex presidente George Bush y por entonces también candidato a la presidencia, por utilizar el español en una reunión. “Estados Unidos es un país donde hablamos inglés, no español", había dicho en su campaña.