¿Caracterizaría al gobierno de Mauricio Macri como un gobierno de derecha neoliberal?
–No sé bien. Al principio Macri fue bastante moderado, no confrontó de manera radical muchas de las cosas que habían hecho los Kirchner. Yo tengo la impresión, y eso en realidad no es especial a la Argentina porque veo lo mismo con Macron en Francia, es que hay un intento por vivificar al neoliberalismo pero en la medida en la cual éste está en el origen de los problemas no pueden aportar una solución y entonces lo que esta pasando es que se están volviendo cada vez más autoritarios frente a las resistencias populares. Lo veo claramente en Francia y me parece que también se ha visto acá.
–¿Al kirchnerismo usted lo incorporaría como parte del populismo de izquierda que desarrolla en el libro?
–Pero claro, absolutamente. Además, me acuerdo muchas veces hablaba con mis amigos kirchneristas y yo decía que para mí el kirchnerismo es la izquierda.
–No sé si tuvo oportunidad de ver el discurso de la ex presidenta Cristina Fernández en Ferro pero ella sostuvo que las categorías de izquierda y derecha están “perimidas”...
–No estoy de acuerdo. Ese es un debate que yo tengo desde hace bastante tiempo con Iñigo Errejón en el libro “Construir pueblo”. Es el único punto sobre el cual no estamos de acuerdo pero no es fundamental. Es simplemente una manera de llamar al populismo. Errejón dice que el prefiere llamarlo eso “populismo democrático” o “populismo inclusivo” porque en España hacer referencia a la “izquierda” no moviliza, que la gente habla de izquierda y piensa en el PSOE y es cierto que los indignados en España no se presentaban como izquierda. Pero realmente hay que distinguirse y eso no lo puedes hacer con el término “populismo democrático” porque hay que reconocer que los populistas de derecha también se defienden en nombre de la democracia.
–Hubo una expresión de la ex presidenta que generó un debate muy fuerte en torno a la necesidad de incluir en un mismo frente a quienes usan pañuelos verdes y celestes. ¿Un populismo de izquierda podría incluir sectores anti abortistas por ejemplo?
–Yo en ese momento no lo registre porque no sabia lo de los pañuelos celestes. Lo que ella dijo sobre incluir a los que rezan y los que no rezan eso me pareció muy bien. Tal vez hubiera podido omitir lo de los pañuelos. De alguna manera yo entiendo el objetivo de CFK de hacer un movimiento populista transversal. Pero lo que yo pienso es especial para el caso Europeo, en América Latina es distinto porque la importancia de las categorías de derecha e izquierda no es la misma. No hay necesidad de reducir el término izquierda a categorías sociológicas, a intereses determinados. Porque hay otro sentido de izquierda que es el que quiero defender el sentido axiológico, de los valores. Los valores que consideras de izquierda son justicia social, la igualdad. Yo se que en realidad aca en Argentina cuando uno ve a la izquierda, piensa más bien en una izquierda de trotskistas. Por eso es distinto. Lo que no me parece bien es ligar la obsolescencia de categorías de derecha e izquierda a cuestiones tecnológicas como implicaba CFK. Si hubiera dicho “en el contexto latinoamericano”, estoy totalmente de acuerdo con eso, tal vez acá no sea tan importante.