El hombre que mató a puñaladas a un niño e hirió de un balazo a su mujer, madre del menor de edad, decidió dispararse en la cabeza para evitar ser detenido por el Grupo Halcón de la Policía Bonaerense, que negoció su captura durante 8 horas y media en el barrio de Tolosa. El hombre, de 27 años, quedó vivo tras el disparo y fue trasladado de urgencia a un hospital.
El operativo comenzó a las 7 de la mañana, cuando la mujer, herida por el roce de una bala calibre 32 en su cara, logró escapar de la casa para denunciar al 911 el ataque contra su hijo, de diez años. Los otros dos hijos de la pareja no fueron atacados y quedaron al cuidado de vecinos, mientras que la mujer fue derivada al Hospital San Martín, donde informaron que su situación era estable.
Al recibir la denuncia al 911, el Grupo Halcón de la Policía Bonaerense mantuvo una negociación de 8 horas y media con el hombre que permaneció en la vivienda, ubicada en la calle 116 entre 529 y 530.
"En ningún momento quiso desistir de su acción, hasta que el personal del Grupo Halcón llegó a metros de la habitación donde estaba atrincherado y se escuchó una detonación. En ese momento se irrumpe en la habitación y se encuentra al hombre con un disparo en la cabeza", describió el comisario Marcelo Corvalán.
Por la mañana había trascendido que el atacante tenía denuncias por violencia de género y que el arma con la que atacó a su hijastro y su mujer era una arma reglamentaria de su pasado como Policía, fuerza de la cual se habría retirado con “carpeta psiquiátrica”. Pero esa información fue desmentida y solo trascendió que era estudiante de abogacía.
Durante las horas que permaneció atrincherado, el hombre se comunicó con el abogado Eduardo Gutiérrez, representante legal del femicida Ricardo Barreda.
En tanto, el padre del niño asesinado quedó también hospitalizado tras protagonizar un accidente automovilístico por la mañana cuando intentó llegar al lugar del crimen. El hombre volcó tras un choque en el cruce de las calles 521 y 140.