Hay dos versiones simultáneas del boxeador Carlos Monzón, una sentada junto a la otra. Hay un Monzón más joven, altivo y en forma, es el campeón del mundo que conquistó a golpes la gloria deportiva y el jet-set internacional y que filma el clásico La Mary con Susana Giménez. Hay otro Monzón más maduro, apagado y abatido, es el ídolo retirado que asesinó a golpes a su mujer, fue condenado a prisión y se prepara para darse el palo final. Los que están sentados son, en realidad, dos actores, el sobrio y cauto Jorge Román –quien protagonizara El Bonaerense, de Pablo Trapero– y el joven talento misionero Mauricio Paniagua: ambos interpretarán distintos momentos de la vida del fallecido púgil y femicida en Monzón, la serie argentina que estrenará la señal Space en 2019, y que por estos días promedia la producción de sus trece episodios. En formato de biopic seriada, Monzón narrará en paralelo distintas etapas de la vida de Carlos Monzón, desde su época triunfal en el ring y ascenso en la gloria mediática, hasta sus años finales, cuando fue juzgado y enviado a la cárcel tras haber matado a Alicia Muñiz, su última pareja y madre de su hijo menor. Esas dos facetas, las del ídolo popular del deporte y la del ícono de la violencia machista, prometen convivir en esta colaboración de Space y Disney cuyo elenco contará también con Celeste Cid (como Susana Giménez), Soledad Silveyra, Gustavo Garzón, Florencia Raggi, Carla Quevedo y Yayo Guridi, entre otros. 

“Los actores tenemos una ley, no juzgar al personaje”, admite Román y revela que estudió las entrevistas que el boxeador concediera durante su estadía en prisión. “Me toca la parte más densa e intensa de la vida de Monzón, cuando él se retira y llegan el femicidio y la cárcel, y en esas imágenes de archivo había un Monzón más vulnerable, frágil, de bajón físico y psicológico, que generaba una mixtura extraña y de contraste con ese tipo violento… tan violento como para haber asesinado a su mujer”, agrega Román. Y destaca que “los guiones son muy completos, tienen miradas múltiples y muy abarcadoras sobre el personaje”. 

“En el casting dije que había hecho boxeo, pero era mentira, así que me pusieron dos coachs”, ríe a su tiempo Paniagua, y enumera los madrugones, la dieta y el entrenamiento de ring que siguió para aprender movimientos de púgil y encarnar los años de Monzón como deportista. El diálogo con PáginaI12 transcurre durante una jornada de grabación abierta a la prensa, que permite reconocer un ring vintage, visualmente limpio y libre de la abundancia de patrocinadores de los escenarios deportivos actuales. La escenografía está lista para reproducir la mítica pelea de 1970 entre Monzón y el italiano Nino Benvenuti, en la que el santafesino se coronara campeón del mundo. Pero se trata de una historia que son dos historias. “Como actriz y feminista me pregunté, ¿por qué contar la vida de un femicida? Y llegué a la conclusión de que revisitar hoy aquella historia, es muy importante y valioso para la lucha feminista”, interviene la actriz Carla Quevedo, responsable de interpretar el personaje de Alicia Muñiz. Y desarrolla: “el desafío fue llevar a la televisión el sufrimiento de Alicia y de todas las mujeres que sufren violencia machista. Es necesario hablar de Monzón, porque si a Alicia la hubiese asesinado un Juan Pérez, un desconocido, ese crimen nunca habría sido lo que fue, un tema nacional. Dos años después del crimen de Alicia, se abrieron las primeras Comisarías de la Mujer en la Argentina. En aquel momento no se hablaba de femicidio, ni siquiera de violencia de género, sino de crimen pasional, que era casi una forma de justificarlo. Y más allá del crimen de Alicia, en la serie se ven muchas otras formas de machismo, como la violencia judicial, o como la forma en que las mujeres son tratadas en la calle. La serie está totalmente teñida por el machismo de la sociedad de aquel momento. Y arroja luz sobre la lucha feminista de hoy.” 

A su vez, la experimentada Soledad Silveyra, interpreta en Monzón a Elba, la madre de Alicia Muñiz. “Traté de encarnar a esas mujeres a las que les matan a sus hijos, esas figuras con tanto dolor, tanta bronca, tanto odio, que vemos en los noticieros”, señala. Y aporta que “cuando Monzón mata a Alicia, comete tal vez el primer femicidio mediático”. Lo que da pie a Carla Quevedo: “Es muy interesante cómo la sociedad argentina tramitó ese crimen en aquel momento y cómo lo vemos hoy, cuando con el #NiUnaMenos y el ‘No es no’, las mujeres siguen muriendo por violencia machista… Monzón fue un ídolo popular muy importante, sí, pero tu ídolo puede ser un femicida. Y es bueno que eso esté en la tele.”