Racing consolidó anoche su ventaja en la punta de la Superliga al derrotar por 3-1 a Talleres, en Córdoba, con un gol de Centurión y un doblete de Lisandro López. El descuento lo convirtió Arias.
En la previa, el viaje a la provincia mediterránea traía aparejados algunos riesgos para la Academia. Claro que esta versión de la T está muy alejada de la que consiguiera clasificar a la próxima edición de la Copa Libertadores. De la mano de Vojvoda, el conjunto cordobés viene protagonizando una campaña irregular (5 victorias, 6 derrotas y 3 empates), en contraposición con el equipo de Avellaneda, que está teniendo un torneo soñado, por el nivel de juego, pero sobre todo por la eficacia para sumar puntos y consolidarse como líder de las posiciones (10 triunfos, 1 caída y 3 igualdades).
Anoche, Racing encontró la ventaja apenas iniciado el cotejo. Dudaron Godoy y Komar en la salida ante la presión de Lisandro López. El capitán ganó la pelota y habilitó a Cristaldo, quien puso el centro atrás y encontró a Centurión para señalar el 1-0. Iban apenas dos minutos y el resultado le daba tranquilidad al visitante. La Academia estaba arriba en el resultado y era superior en el desarrollo, por eso no extrañó que ampliara la ventaja. El segundo tanto lo convirtió el Licha López de penal.
Talleres intentó modificar la historia en el complemento, con otra actitud. Ese renovado envión anímico sufrió un duro golpe cuando el Licha López convirtió el 3-0. Pero no se rindió la T, que agigantó su ilusión con el descuento marcado por Arias. El local fue por más, acorraló a Racing, pero no le alcanzó para cambiar una noche en la que le salió poco, en contraste con la de Racing, que estuvo cerca de la ideal.