Los jefes de la banda Los Monos fueron condenados ayer por el delito de narcotráfico en el marco de la causa denominada "Los Patrones". Las penas de Ariel "Guille" Cantero y Jorge Emanuel Chamorro fueron de 15 y 17 años de prisión respectivamente. Asimismo, resolvió 12 años de cárcel para Vanesa Barrios y Jésica Lloan, las parejas de ambos. Mientras que Patricia Celestina Contreras, -madre de Cantero- recibió una pena unificada de 10 años de prisión, y su hermanastra, Patricia María del Valle Reyna, recibió una sanción de 6 años y 6 meses de cárcel. Una hermana del jefe de la organización, Macarena Cantero, fue beneficiada con una probation: por un año deberá realizar tareas de limpieza en un centro comunitario, según resolvió el Tribunal Oral Federal Nº3. Los jueces solicitaron además a la Fiscalía que investigue la probable relación de las fuerzas de seguridad con la banda.
El debate oral concluyó con 34 condenas y cinco absoluciones, y constituye el primer juicio por narcotráfico a integrantes de la banda "Los Monos", que según investigadores judiciales y policiales opera en ese mercado ilegal desde hace no menos de una década.
En diálogo con la prensa, el fiscal del caso, Federico Reynares Solari, dijo tras conocerse la sentencia que está "realmente satisfecho" porque "todas las personas respecto de las cuales pedimos una consecuencia punitiva fueron condenadas".
"Lo importante de este juicio es que se demostró que había una organización", destacó el fiscal federal, para quien "se logró llegar a los eslabones más altos" de la banda, ya que no se quedaron "simplemente en el punto de venta".
Por su parte, uno de los abogados defensores de Cantero, Carlos Edwards, expresó su rechazo a la condena, aunque consideró que fue favorable que el tribunal haya dictado una pena menor a los 18 años que había solicitado el fiscal en su alegato.
"No lo compartimos porque consideramos que durante el desarrollo del debate oral no se produjo ninguna prueba que acredite el grado de responsabilidad penal grave que se le adjudicó en la sentencia", opinó el letrado.
En sintonía, el tradicional defensor de la familia Cantero, Fausto Yrure, sostuvo que "de ninguna manera se condice la parte resolutiva de la sentencia con la prueba que se produjo en el debate", y adelantó que apelará ante la Cámara Federal de Casación Penal.
El Tribunal Oral Federal Nº3 de Rosario (TOF3), integrado por los jueces Eugenio Martínez Ferrero, Osvaldo Facciano y Ricardo Moisés Vásquez, lo condenó a "Guille" Cantero como organizador del transporte, fabricación y comercialización de estupefaciente agravada por la participación de tres o más personas. Según la acusación, Cantero lideró desde la cárcel donde cumplía prisión preventiva, entre fines de 2014 y diciembre de 2015, una banda narco cuyas órdenes eran ejecutadas por su pareja, Vanesa Barrios.
En abril pasado, Cantero había recibido una condena a 22 años de cárcel en la Justicia santafesina por homicidio y asociación ilícita que tenía por fin la comisión de múltiples delitos.
Su lugarteniente "Ema" Chamorro, quien también estaba preso en la cárcel de Piñero, fue sentenciado por la misma figura que Cantero, pero en su caso la condena fue unificada con otra anterior. La pareja de Chamorro, Jésica Lloan, también fue considerada ejecutora de las órdenes impartidas por él desde la prisión.
Otra de las penas altas otorgadas por el Tribunal fue para Elías Javier Sánchez, alias "Patrón" o "Rata", condenado a 14 años de prisión, quien de acuerdo al juicio era proveedor de marihuana de "Los Monos".
El proveedor de cocaína de la banda, Diego Fabián Cuello, fue sentenciado a 11 años y 6 meses de reclusión, que al unificarse con otra condena anterior se convirtieron en 12 años.
El acusado Horacio Luis Castagno, alias "Viejo", fue condenado a 9 años y 6 meses por el delito de tráfico de estupefacientes en la modalidad de fabricación, puesto que le encontraron un "laboratorio" en su departamento del centro rosarino y fue acusado de cocinar la droga para "Los Monos".
En tanto, Cristian Oscar Torancio recibió una pena de 8 años por acopio de drogas. Cuando le allanaron el galpón donde residía en la ciudad de Corrientes, en diciembre de 2015, los policías le secuestraron 378 panes de marihuana, según la causa.