Cristina Kirchner acusó al juez Ariel Lijo de “organizar las escuchas” y al secretario del magistrado, Juan Rodríguez Ponte, que además es funcionario de la Corte Suprema a cargo de la captación de comunicaciones, de haberlas filtrado. “¿A quién le quieren hacer creer que no tienen nada que ver con el espionaje político?”, preguntó la ex presidenta en las redes sociales.
Fernández de Kirchner posteó la nota del portal Infocielo “El hijo de un intendente PRO, detrás de las escuchas a Cristina”. El artículo señala que el director ejecutivo de la Dirección de Captación de Comunicaciones, encargado del manejo y control de las escuchas, es Juan Rodríguez Ponte, hijo del intendente PRO de General Lavalle, José Rodríguez Ponte. Además de haber sido designado por la Corte en ese ente –luego de que Mauricio Macri pasara las escuchas de la órbita de la Procuración a la Corte–, Rodríguez Ponte es secretario en el juzgado del juez Lijo, que tiene la causa en la se dispusieron. “No se ordenaron para investigar nada, se usó esa causa para hacer espionaje político”, aseguró la ex presidenta.
También habló del tema el otro escuchado, Oscar Parrilli, que dijo que la difusión del audio “es un mensaje cuasi mafioso a toda la oposición”. Parrilli interpretó que en esto “aparece con toda claridad el verdadero (Mauricio) Macri, que reitera una política muy típica de él que es escuchar a sus adversarios políticos o a los que no coincidan; ya lo hizo desde la ciudad de Buenos Aires”.
Como primera reacción, la Corte Suprema negó tener relación con la “entrega, filtración o divulgación” del audio. “No ha habido entrega, filtración o divulgación de material alguno por parte de esa dependencia fuera de los reglamentos de actuación y protocolos de cadena de custodia establecidos para garantizar el resguardo de la información”, aseguró la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado en un comunicado comunicado distribuido por el CIJ, la agencia de noticias del Poder Judicial. Para Carlos Beraldi, abogado Fernández de Kirchner, la escucha era “materia de carácter reservado” y quien lo haya “filtrado” cometió un delito. “Me llama la atención que el órgano que está a cargo de las escuchas haya sacado un comunicado diciendo que no fueron ellos los que lo filtraron, pero no dice nada de que hayan iniciado una investigación”, apuntó. El abogado añadió que el registro de la conversación escapaba a la investigación por supuesto encubrimiento de la fuga del acusado por el triple crimen de General Rodríguez, Ibar Pérez Corradi –excusa con la que fueron realizadas las pinchaduras–, y que, por lo tanto, debió ser “destruida”. Respecto de la denuncia del fiscal Guillermo Marijuan por presunto “abuso de autoridad” contra la ex presidenta, la calificó como “un disparate”.