Las endebles explicaciones del jefe de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI), Gustavo Arribas, para defenderse de la imputación judicial sobre la sospechas de haber recibido coimas de parte de un financista vinculado a la constructora brasileña Odebrecht –investigada en el caso de corrupción “Lava Jato”– agigantó el reclamo opositor para que el jefe de los espías rinda explicaciones ante la Comisión Bicameral de Seguimiento los Organismos de Inteligencia. Los diputados del Frente para la Victoria (FpV-PJ) ampliarán hoy el pedido ya realizado de interpelación a Arribas no sólo por la denuncia sobre la supuesta corrupción sino también por “la difusión ilegal” de una conversación telefónica entre la ex presidenta Cristina Kirchner y el ex titular de la AFI, Oscar Parrilli, por la que responsabilizan directamente al presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti. “(Mauricio) Macri convirtió a la AFI en la vieja SIDE” y “no nos quedan dudas que con Arribas a la cabeza” el gobierno utiliza los servicios de inteligencia “para espiar a opositores”, sostienen los diputados de la bancada kirchnerista.
“A la falta de explicaciones claras sobre la presunta coima que Arribas cobró de Odebrecht, y que motivó su imputación hoy por parte del fiscal federal Federico Delgado, se suma la maniobra delictiva cometida al difundir la escucha mencionada. Porque si hubo una orden judicial para realizar la escucha, es de gravedad institucional. Y si no la hubo, es más grave aún”, dice el comunicado del bloque que preside Héctor Recalde.
Allí, también repasan cómo fue el proceso mediante el cual el presidente Macri traspasó por decreto las escuchas a la Corte Suprema. “Mediante un DNU firmado por Macri, se pasó el control de las escuchas de la órbita de la Procuración General de la Nación a la Corte Suprema de Justicia. Las escuchas a Parrilli fueron hechas por un grupo de espías de la AFI. Es decir que la responsabilidad por difundir la escucha responde a una cadena de responsabilidades que comienza en la Corte, sigue en (el camarista) Martín Irurzun luego la AFI, y los que llevan la causa en la que se acusa a Parrilli por presunto encubrimiento del narcotraficante Ibar Pérez Corradi, quien ya había sido detenido cuando se produjo la conversación entre Fernández de Kirchner y Parrilli, el juez Ariel Lijo y el fiscal Guillermo Marijuan”, sostiene el comunicado sobre la cadena de responsabilidades de la filtración.
La ampliación del pedido de interpelación a Arribas que realizará hoy la diputada Teresa García, que integra la bicameral, le apunta también a Lorenzetti. García sostiene en su escrito que la Corte designó por sorteo a Martín Irurzun, el juez de la Sala II de la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal, como director general de la Dirección de Captación de Comunicaciones del Poder Judicial de la Nación (Dicom), y al juez de la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia, Javier Leal de Ibarra. A su vez, Lorenzetti y los camaristas nombraron como jefe operativo de la Dicom al ex secretario del juez federal Ariel Lijo, el joven Juan Tomás Rodríguez Ponte. “Pero como Rodríguez Ponte trabaja directamente con el Ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich, Lorenzetti es el responsable directo de la filtración de la escucha a la ex presidente”, sentenció García a PáginaI12. Rodríguez Ponte además es hijo del intendente del PRO en General Lavalle, José Rodríguez Ponte.
García ya había presentado –como adelantó este diario– un pedido ante la Bicameral para que Arribas comparezca ante los legisladores nacionales cuando se conoció la versión periodística de una transferencia bancaria de casi 600 mil dólares de un cambista vinculado a la empresa Odebrecht a la cuenta personal del hoy jefe de los espías en el Credit Suisse .
“Estas acusaciones no pueden escindirse de otros antecedentes de Gustavo Arribas, quien aun tiene una causa penal abierta por evasión tributaria, conforme ha denunciado el colectivo de organizaciones de la sociedad civil Iniciativa Ciudadana para el Control del Sistema de Inteligencia (ICCSI) en el documento de impugnación de los actuales titulares de la AFI, ante la comisión de Acuerdos del Senado, cuando fuera el periodo de tratamiento de sus pliegos para ocupar los cargos detentan”, dice el escrito que García presentó el 12 de enero en el despacho del senador Juan Carlos Marino que preside la bicameral y que el radical pampeano nunca convocó.
La diputada del FpV-PJ también extendió el pedido de investigación de la conducta de Arribas a la Oficina Anticorrupción. Pero la macrista Laura Alonso tampoco dio cuenta de la presentación sobre el jefe de la AFI.
En tanto, la bancada kirchnerista también criticó duramente las características que a su juicio adquirió la agencia de inteligencia en lo que va de la gestión macrista. “No nos quedan dudas de que la AFI actual, con Arribas a la cabeza, es igual a la vieja SIDE. Se la está utilizando para espiar a opositores. Como ya lo hizo Macri siendo jefe de Gobierno porteño el gobierno, ordenando al ex espía Ciro James y el ex titular de la Policía Metropolitana Jorge “Fino” Palacios espiar a opositores, causa en la que fue sobreseído apenas asumió Macri como presidente, pese a que se probó que el espionaje telefónico existió. Hoy continúan procesados James, Palacios, (Osvaldo, ex vicejefe de la Policía Metropolitana) Chamorro y (Mariano, ex ministro de Educación) Narodowsky”, insiste el comunicado del bloque de diputados del FpV-PJ.
Tras repasar el retroceso de los indicadores económicos y sociales, los Panamá Papers y la acumulación de causas por corrupción contra el entorno presidencial, “ahora –culmina el comunicado– se le suman las certezas de que cualquier ciudadano puede ver violada su intimidad y de que no existe seguridad jurídica, es el mayor riesgo institucional que sufre el país desde que asumió Macri. Sin dudas, el primer año de su gobierno es el año que vivimos en peligro todos los ciudadanos argentinos”.