Siete meses después del histórico referéndum durante el cual los irlandeses se pronunciaron contra la prohibición constitucional de la interrupción voluntaria del embarazo (IVE), el Parlamento de ese país aprobó el proyecto de ley que legaliza el aborto. Es hecho "pone fin a los viajes solitarios, a la estigmatización y apoya las decisiones de las mujeres en nuestro país", destacó el ministro de Salud, Simon Harris.
La nueva norma que comenzó a ser tratada desde octubre aprueba el aborto sin condiciones hasta las 12 semanas de gestación o en los casos de "riesgo para la vida" o de "grave peligro para la salud" de la mujer. También lo permite en caso de anomalía del feto que podría llevar a su muerte in utero. La ley debe aún ser firmada por el presidente Michael Higgins antes de entrar en vigor
Para el gobierno, la ley es producto de “un momento histórico para las mujeres irlandesas”. Así lo destacó el premier Leo Varadkar al recordar que, el 25 de mayo pasado, el 66 por ciento de los irlandeses votaron por referéndum por la liberalización del aborto. Esa consulta fue un sismo cultural en ese país de 4,7 millones de habitantes de tradición fuertemente católica.
"Hace poco más de 200 días, vosotros, el pueblo irlandés, votasteis por derogar la octava (enmienda de la Constitución irlandesa, que en 1983 grababa a fuego el tabú del aborto en Irlanda) para que cuidemos de las mujeres con compasión. Hoy hemos votado la ley que transformará [este deseo] en realidad", declaró en Twitter el ministro de Salud, Simon Harris.
Hasta ahora, las mujeres que deseaban abortar estaban hasta ahora obligadas a viajar a Reino Unido. Por eso, el funcionario rindió homenaje a las "activistas que lucharon durante 35 años".