No todo lo que brilla es oro: también podría tratarse de uno de los popularísimos collages de Sara Shakeel, emergente artista pakistaní que está haciendo olas en las convulsas aguas de la web con sus rutilantes obras digitales. Ostentosas piezas donde el exceso es ley, a juzgar por la sobredosis de cristales, brillantes y diamantes que aplica digitalmente la damisela en fotografías retocadas de: catedrales, paisajes, aviones, pilcha, patas de gatitos, músicos y actrices, radiografías, las más mundanas comidillas, hamburguesas o papas fritas sin más. Todas reciben símil tratamiento, siendo correspondientemente “glitterizadas” por la joven Shakeel, que no ha tenido ningún entrenamiento formal en artes: estudió odontología pero abandonó su carrera como dentista para convertir al mundo en un lugar más resplandeciente, en ocasiones ligeramente surrealista. Y sí que ha dado literal brillantez recientemente a la foto de un avión de Emirates Airlines, sobre la que incrustó diamantes por doquier, creyendo el crédulo público que se trataba de una aeronave real, volviéndose viral  la (falsa) noticia. Por lo demás, vale decir que los primeros collages que llamaron especialmente la atención de los internautas fueron sus intervenciones a fotos de estrías: en plan body positive, Sara las reivindicaba con bonitilla purpurina. “Cristales y diamantes son mi modo de ver al mundo, entendiendo que hasta lo más campechano puede ser algo valioso, que necesita ser cuidado”, asegura la joven adepta al bling bling, que suma cientos de miles de seguidores en Instagram y algunos premios bajo la manga (entre ellos, un Glamour Talent Award, de Milán).