“El 2018, en lo económico, estuvo signado por una fuerte depreciación de la moneda local, que derivó en una aceleración inflacionaria y caídas de los niveles de actividad. Al momento de encontrar una explicación para este escenario, pueden mencionarse ciertas falencias de gestión”, señala la Cámara Argentina de Comercio (CAC). La entidad difundió un documento en el que plantea una serie de desafíos para sortear la recesión actual derivada de las políticas del Gobierno y de un contexto internacional adverso. “El impacto de la crisis en materia de actividad y las muy elevadas tasas de interés, producto de la política contractiva llevada adelante por el Banco Central para contener la inflación, comprometen a empresas, especialmente a las pymes”, asegura la CAC.
El documento comienza con un panorama de los tres años de administración Cambiemos, en el que resalta “importantes logros”, como eliminar la restricción a la compra de dólares y la reducción de los subsidios a los servicios públicos. Sin embargo, reconoce una serie de dificultades y de políticas desacertadas que comprometieron la actividad, en particular del comercio. “En lo que respecta a Comercio y Servicios, los últimos datos disponibles acusan el impacto de la crisis en materia de actividad”, señala la entidad.
De cara al 2019 plantea una serie de propuestas aglutinadas en cinco ejes temáticos para “reducir el costo argentino”, entre los que se destacan medidas tributarias, laborales, de desburocratización y simplificación de trámites, medios de pago electrónicos y fomento al comercio exterior. “La comparación internacional muestra que la presión impositiva es mayor en nuestro país que en la región y otras naciones del mundo desarrollado. Se señalan los problemas derivados de los costos laborales no salariales, las falencias logísticas, la deficiente calidad de la infraestructura, el escaso desarrollo del sistema financiero y la concentración en algunos mercados”, sintetiza.
