La crisis que provocó la política aerocomercial que implementa el gobierno nacional desató un nuevo conflicto. En esta oportunidad, la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) anunció un paro de 24 horas para el próximo jueves 27 de diciembre ante la falta de respuesta al reclamo paritario pero sobre todo frente a los despidos, la precarización laboral y persecución sindical que denunció el gremio que conduce Juan Pablo Brey. El dirigente sindical aseguró a PáginaI12 que “todo forma parte de un plan que termina con la destrucción de Aerolíneas y Austral y nosotros vamos a dar pelea”. En tanto, el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, se limitó a pedir “cordura” a los gremios aeronáuticos.
El dirigente advirtió que fruto de la medida de fuerza “quedarán de esta manera afectados todos los vuelos de cabotaje y partidas internacionales de todas las aerolíneas”. La intención del sindicato es marchar ese mismo día hasta la sede del Ministerio de Transporte.
Brey aseguró además que “nuestra pelea es contra la política aerocomercial que lleva adelante este Gobierno porque no solo precarizan, persiguen y despiden personal sino que además forman sindicatos paralelos con el objetivo de desplazarnos para poder destruir Aerolíneas Argentinas y Austral”.
El dirigente indicó además que su gremio viene desde hace meses intentando alcanzar un acuerdo para que las autoridades cumplan con la paritaria de 2017. “La responsabilidad, madurez y paciencia demostrada por los trabajadores no encuentra en ningún punto una contraparte a la altura de las circunstancias, ni dispuesta a dar soluciones”, afirmó. Por otra parte, el sindicalista dijo que la medida de fuerza surge ante “la absoluta falta de respuesta y apertura al diálogo exhibida tanto por parte de las empresas, como del Gobierno nacional, habida cuenta las asambleas en el lugar de trabajo con afectación de servicios realizadas por esta Asociación los días 2, 16 y 27 de noviembre, contra la actual política aerocomercial y sus consecuencias sobre las diferentes empresas y sus trabajadores”.
Al igual que el resto de los gremios aeronáuticos, que mantienen profundas diferencias con Brey, una de las causas que provocó el paro es el incumplimiento por parte del Estado con la paritaria 2017 “incumplida y vencida en Aerolíneas Argentinas y Austral, cuya negociación actual se encuentra estancada y con ausencia de una política de Estado que garantice continuidad y crecimiento de la empresa”.
Por otra parte, los Aeronavegantes advierten que este incumplimiento paritario no es exclusivo de Aerolíneas sino que pasa lo mismo con Latam Argentina, que se niega a actualizarlo y “sin oferta a una semana de su vencimiento”. Brey denunció que esta empresa está en un plan de “achicamiento de la filial Argentina del holding”, mientras que en Avianca Argentina se evidencia un “retroceso con una alerta por pérdida de fuentes de trabajo y marcha atrás en el plan de expansión”.
Las low cost como Andes y Flybondi no son la excepción. La primera ha despedido empleados y paga los salarios en cuotas en tanto que la empresa mimada del ministro Dietrich impulsa un proceso de “precarización laboral y persecución sindical” que derivó en el despido de una aeronavegante luego de que intentara afiliarse a la AAA.
Por ahora la única respuesta del Gobierno la dio Dietrich, quien dijo esperar que “haya cordura en los dirigentes sindicales que no son todos y que lamentablemente han llevado a un nivel de conflictividad muchas veces por razones políticas y no sectoriales”.