Javier González Fraga, el flamante presidente del Banco Nación, había despertado expectativa luego de su designación cuando dijo “queremos tener un país de propietarios”. La explicación era que “cuando te metés a la villa 31 o a la 1-11-14 y preguntás cuánto pagan por una pieza, pagan 2000 pesos. Eso debería alcanzar para poder comprar y tener una escritura”.
La meta no se logrará, sin embargo, con el primer plan de créditos para la vivienda que el Nación lanzó bajo la gestión de Fraga –aunque aún no esté formalmente designado. Los créditos anunciados financiarán la construcción, ampliación, refacción y terminación de viviendas, sobre terrenos propios. Serán otorgados en pesos a un plazo de 20 años, con una tasa fija del 14,6 por ciento durante los primeros tres años. Luego de ese lapso, la tasa se reconvertirá en variable y se ajustará según el incremento de los salarios (el Coeficiente de Variación Salarial, CVS). El Banco financiará el 80 por ciento del valor de la construcción, que no podrá superar los 2.868.000 de pesos. Los titulares (matrimonios o convivientes) podrán incluir a familiares como codeudores, con la idea de sumar ingresos para pedir más dinero.
Según la Cámara Argentina de la Construcción (CAC), el valor promedio de m2 para la construcción asciende a $13.367. Es decir que para edificar una casa de 70 m2, se necesita casi aproximadamente 1 millón de pesos. Justamente ese monto es el que eligió el Banco Nación para simular un préstamo en su web.
La cuota inicial para un crédito de ese tipo será de $12.422, muy lejos de los 2 mil pesos que estimaba González Fraga como valor de referencia. Como la cuota no puede superar el 30 por ciento de los ingresos del grupo familiar, según los requisitos para acceder al crédito, la familia deberá sumar casi 40 mil pesos de ingresos mensuales.
Ahora bien, en la última Encuesta Permanentes de Hogares, el Indec ubicó a esa franja de ingresos -desde 35 mil hasta los 718 mil pesos mensuales- como la más pudiente. Ellos son quienes podrían acceder a los créditos de González Fraga. Estos hogares representan el 10,8 por ciento del total.
Además, las familias que soliciten el crédito deberán tener una base ya consolidada de ahorros previos: un terreno de su propiedad y unos 200 mil extra para completar los requisitos bancarios.
Si bien esta línea de créditos hipotecarios es mucho más atractiva que la venía ofreciendo –con la que en 2016 sólo otorgaron 7.600 créditos en todo el país-, no alcanzará para forjar el “país de propietarios” al que aspira González Fraga.