Real Madrid no hizo lugar a nuevas sorpresas en el Mundial de Clubes y vapuleó en la final al local Al Ain por 4-1, coronándose campeón por tercera vez consecutiva. Con goles de Luka Modric en el primer tiempo y de Sergio Ramos, Marcos Llorente y Yahia Nader en contra en el complemento, el elenco conducido por Santiago Solari tomó aire del flojo momento deportivo que vive la Casa Blanca, que transita una turbulenta temporada tras las salidas de Cristiano Ronaldo y Zinedine Zidane a mitad de año. El tanto del honor emiratí, que fue el 1-3, lo marcó el japonés Tsukasa Shiotani, uno de los pilares del equipo que supo sorprender a River en semifinales y sentenciar la peor actuación argentina de la historia en este tipo de competición.