Con la muerte de tres hombres, uno de ellos bombero voluntario, en las regiones de Maule y Biobío ascendió a diez el número de fallecidos por los incendios forestales que azotan siete regiones del centro y sur de Chile. Además, las autoridades tratan de localizar a dos personas desaparecidas. Por otra parte, durante la noche del miércoles y la madrugada del jueves las llamas arrasaron el pueblo de Santa Olga, cuyos 7000 pobladores habían sido evacuados. La Corporación Nacional Forestal informó que de los 103 incendios que llevan consumidas 273 mil hectáreas, 48 han sido controlados y 53 siguen activos.

El primer fallecido fue encontrado en Maule, en el centro del país, en el pueblo de Santa Olga, cuando rescatistas revisaban los escombros del poblado que fue arrasado por las llamas durante la madrugada del jueves, y cerca de mil casas destruidas.

“Aún no se conoce la identidad de la persona por lo que no se podría determinar si es un residente o un persona que fue a ayudar”, dijo a medios locales el comandante de los bomberos de la localidad vecina de Constitución, Alexis Crisóstomo.

El segundo cadáver lo encontró la policía en la región de Biobío, 500 kilómetros al sur de Santiago. La gobernadora de Concepción, Andrea Muñoz, confirmó que se encontró el cadáver de un hombre en Lloicura, comuna de Tomé.

La tercera víctima, el bombero Juan Eduardo Bizama, murió cuando el camión cisterna en el que viajaba volcó producto de la caída de un árbol en la ruta.

Un día antes, en Maule, los incendios causaron las muerte de dos carabineros y un bombero mientras realizaban tareas de rescate y evacuación de pobladores. Los dos carabineros fallecidos, el sargento primero Freddy Fernández Garcés y el cabo primero Mauricio Roca Sepúlveda, quedaron rodeados por las llamas cuando se encontraban coordinando el rescate de una familia en Maquehua, comuna de Constitución.

Ese mismo día, en un bosque de Santa Olga, murió el bombero voluntario Hernán Avilés González. Mientras la dotación trataba de apagar las llamas que rodeaban a una vivienda, González intentó rescatar a la familia y quedó atrapado.

Diez días antes, el 15 de enero, murieron tres brigadistas de la Conaf y , cuatro días después, un agricultor que se estrelló con su moto contra un árbol, mientras huía del incendio que alcanzó sus tierras en la región de La Araucanía.