La escena dura menos de 30 segundos: el hombre –vestido con traje y corbatín–y la mujer –emperifollada en un ornamentado vestido con volantes– sonríen, se abrazan, se besan; se dan las manos, vuelven a besarse. Empero, lo breve, si bueno, dos veces bueno; y el medio minuto de este microfilm mudo y recientemente hallado ha bastado para que esté hoy en los anales de la historia del cine estadounidense. Tal es así que Something Good-Black Kiss, como se titula esta película de 1898, ha sido una de las 25 cintas incorporadas este mes por el Registro Nacional de Películas de la Biblioteca del Congreso del país del norte, elegidas “por su importancia cultural, histórica y estética para el patrimonio cinematográfico”. Más que justificadas las razones porque, según voces especializadas, se trata de la primera representación cinematográfica conocida de un beso de una pareja afroamericana. En honor a la especificidad, entre los actores de vaudeville Saint Suttle y Gertie Brown, dirigidos entonces por William Selig, productor pionero de la industria. Al parecer, se habría inspirado en The Kiss, el film de 18 segundos de Thomas Edison, de 1896; y es, según la especialista en cine afro mudo y contemporáneo Allyson Nadia Field, que ayudó a identificar a los intérpretes y al realizador, “una movilizante y poderosa imagen de genuino afecto”. Libre de estereotipos y caricaturas racistas (a diferencia de la mayoría de las representaciones de época), el breve clip fue descubierto por casualidad por Dino Everett, un archivista de la Universidad del Sur de California, que encontró la impresión de nitrato del siglo XIX en medio de un lote de películas mudas que antaño fuera propiedad de un coleccionista de Louisiana. Everett contactó a Field, y el resto, como suele decirse, es historia del cine negro y del cine en general, de más está decir.