Lamento mucho la muerte de Hector Timerman. Lo vi una sola vez en mi vida, en Yad Vashem, Jerusalén, en 2014, cuando como canciller argentino, depositó una ofrenda floral junto al Presidente Shimon Peres en el día de recordación de las victimas de la Shoa.
Un año más tarde, una denuncia en su contra -que como juez estudié y deseché en dos oportunidades, en 2015 y en 2016- y que finalmente iba a prosperar a partir de un fallo de Casación, desencadenaría luego su procesamiento con prision preventiva.
Si bien la causa del Memorándum ya está en la etapa de juicio oral, sería deseable que cuanto antes se dé inicio al debate, de modo tal de arribar a la verdad de lo acontecido, no sin antes escuchar lo que tienen para decir el ex Secretario General de Interpol Ronald Noble y el propio Héctor Timerman, que plenamente consciente de su cuadro de salud, ya prestó declaración ante el Tribunal Oral, como para que la Justicia haga su trabajo de un modo pleno y satisfactorio para los fines a los que han sido llamados.