El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, confirmó que el Gobierno nacional se mantendrá al margen de las discusiones paritarias de los empleados públicos provinciales, y mencionó como antecedente el caso de los docentes, para quienes ya se definió que el salario inicial del sector sea un 20 por ciento superior al salario mínimo, vital y móvil. Además, anticipó que los gobernadores se reunirán el 2 de febrero para acordar una política común respecto de "las paritarias de los empleados del sector público".
En declaraciones a radio El Mundo, el ministro reafirmó que "este año el Gobierno nacional (sólo) se ocupará de las paritarias de sus empleados", y que las negociaciones salariales de los trabajadores provinciales quedará a cargo de cada jurisdicción.
Tras reivindicar el piso acordado en la última paritaria nacional docente, el funcionario sostuvo que "una vez fijada esa pauta general para todos los años, ya no tiene sentido la injerencia del Gobierno nacional en la discusión", postura que ya había anticipado su colega de Educación, Esteban Bullrich, quien había afirmado que "la paritaria nacional nunca tuvo lógica”, declaración que le valió el repudio del secretario general del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA).
En aquella oportunidad, Roberto Baradel denunció que las paritarias nacionales están contempladas en la legislación vigente, auguró un conflicto seguro y advirtió que si no las respetaba "el Gobierno estaría inclumpliendo con la ley”.