Enfocada en una idea espiritual sobre “la mitología que puede tener la mente”, Javiera Mena propone hacer un viaje interior a través de Espejo, el disco que presentará por primera vez en Argentina este domingo. El show en vivo trae aires nuevos: será de día, culminando en el atardecer, y ya no se enfocará en la danza sino en las luces y en lo visual. Así se lo ve en el video de Alma, el último que lanzó la artista chilena. “Hay una propuesta lumínica muy interesante para que la gente haga el viaje interior que estoy planteando en este disco”, dice desde Santiago de Chile.
Durante los cuatro años que separaron su quinto trabajo del anterior, Otra era (2014), Javiera fue en busca de otras composiciones que se alejaran del romanticismo y la pasión, animándose a bucear en ese otro mundo invisible. Con la tecnología y el pop como emblemas, Espejo se luce por el contenido de las letras, además del sonido impecable. “Viste el universo en el silencio”, es una frase de Dentro de ti, la canción que abre el disco. Y así suceden palabras como intuición, constelaciones, soledad, conexión, alma o conciencia, logrando una unidad de sentido. “Por el 2010 empecé a practicar el budismo y los discos que vinieron después, como Mena (2010), tienen presente esta búsqueda. Creo que en Espejo me atreví a que el hilo conductor fueran esas temáticas”, dice Mena.
Los primeros acercamientos de Javiera a la música fueron a través de las emisoras de radio AM. Luego, en los 2000, escuchó el electroclash y el electro, y se volvió loca con el dance. Sus primeras composiciones fueron con guitarra y música electrónica. “Quería hacer una canción que me envolviera con su letra pero a la vez me diera ganas de bailarla. Ese ímpetu me ha perseguido y creo que fue una inyección de que por ahí iba lo mío”, reconoce, y alude a la alianza de lo nuevo con el lugar común de lo que puede transmitir una canción de los ‘80. Así, ella va de la innovación a lo tradicional. “Me di cuenta de que con la tecnología, con una computadora, yo podía armar canciones y tener una riqueza tímbrica infinita, que es lo que tiene la música electrónica”, explica.
En el track 9, Todas aquí, Javiera les canta a las mujeres. “Creo que siempre les canto a las mujeres. Como soy mujer, pienso como mujer, tengo muchas amigas y amigos muy femeninos también. No quise decir todos, tampoco quise decir todes; quise simplemente hablar de mujeres y me encantaría también que un hombre se sintiera identificado con el todas”, dice. La chilena está al tanto del movimiento feminista en Argentina y dice que es un buen momento para cantar estas letras desde su intimidad. “Porque son letras íntimas pero también hablan de un feminismo, un atreverse, una mujer metida en la tecnología donde todo te dice que no te metas”, expresa.
Mena se muestra como la mujer tecnológica que es y hace hincapié en el sonido y la electrónica, cuyas artes parecieran haber sido reservadas a varones. “Son lugares de mucho liderazgo, de mucha toma de decisiones, de mucho poder. Por eso, culturamente, se nos dice de pequeñas que ‘ahí no’. Pero eso está cambiando”, dice Javiera, quien desde hace un tiempo decidió enarbolar la bandera gay cuando le preguntaron si tenía novio. “Tengo novia”, respondió en el afán de ser natural y no encerrarse en el closet. “Mi visibilidad, mi bandera, me las tomo como algo muy normal. Hay una frase que dice ‘Supéralo, yo soy gay’”, cuenta, divertida. Y pone en un espejo el pop y la electrónica como algo que van lógicamente juntos, como una buena canción ochentosa.
* Domingo 20 a las 19 en el Parador Konex, Ciudad Cultural Konex, Sarmiento 3131.