Un equipo liderado por la arqueóloga del Conicet Clarisa Otero descubrió en el Pucará de Tilcara, Jujuy, los restos de una mujer adulta que aparentemente tuvo un destacado rol social durante la dominación incaica en la Quebrada de Humahuaca, producida entre los siglos XV y XVI. 

Según informó un comunicado del Conicet, sus restos estaban colocados en posición genuflexa, junto a diversidad de piezas cerámicas, huesos de animales, cuentas de collar, placas de metal, un tubo de hueso que pudo ser parte de un instrumento musical o para inhalar alucinógenos, y también de pigmentos, bloques de pedernal, y dos morteros con adherencias de mineral de cobre y hematita.

“Este hallazgo refuerza las nociones que teníamos acerca de las prácticas funerarias prehispánicas, pero a su vez brinda nueva y valiosa información. Por un lado, la ausencia de una estructura para contener el cadáver y la presencia de fauna cadavérica que demuestra que la mujer estuvo parcial o completamente expuesta, revelan que su exposición fue intencional y su descomposición transcurrió in situ. Esto implica que una vez que fue depositado el cuerpo en el patio, no se lo movió”, explica Otero.